¿Qué afecta nuestra autoestima?

La palabra autoestima no es ajena al conocimiento de la sociedad, a decir verdad, es utilizada con bastante frecuencia. Se entiende por autoestima como el sentido de valía de una persona, es decir, la capacidad de reconocer todos nuestros aspectos positivos. La autoestima puede ser compatible con diferentes aspectos de nuestra vida, por ejemplo, ser atractiva físicamente, tener un alto desempeño escolar, ser un atleta destacado, tener una relación cercana con Dios, etc. Cada ser humano es único e irrepetible, por lo tanto el desarrollo de la autoestima es diferente en cada persona.

Cuando se habla de este tema, se plantean principalmente dos aspectos: La baja y alta autoestima. La primera, se caracteriza por una autoevaluación negativa del individuo, y a diferencia de lo que muchos creen, la autoestima no desciende de la noche a la mañana, es un proceso gradual, en la que muchas veces, la persona no se está dando cuenta de esta evaluación. En este procedimiento, la personalidad innata del individuo juega un papel importante, pero las experiencias que atraviesa y las personas que están en su vida influyen decisivamente.

Durante la infancia o la niñez, cuando el ser humano es más vulnerable a los sucesos externos, llegan a ocurrir experiencias, que pueden dañar nuestra autoestima y es cuando comenzamos a sentirnos menos valiosos. Sin embargo, estás experiencias no son inherentes a la niñez o la infancia, si no que pueden ocurrir también en nuestra vida adulta.    

Algunas circunstancias, que pueden marcar para siempre nuestra autoestima son:

1. Fracasar en las expectativas de nuestros padres. Todos los padres, esperan lo mejor de sus hijos; sin embargo, hay padres que no solo lo esperan si no que lo exigen. Esta situación crea demasiada presión en los hijos, ya que no importa lo que hagan siempre habrá algo que hagan mal.

2. Sufrir acoso o bullying escolar o laboral.  Aunque la palabra bullying parezca estar de moda últimamente, la realidad es, que la mayoría de las personas han sufrido de acoso durante al momento de su vida, solo que antes se le llamaba carrilla. En muchas ocasiones, el acoso escolar y/o laboral va  acompañado de discriminación, racial, por status social, por discapacidades físicas, o cualquier otra circunstancia. El bullying  poco a poco va creando exclusión social, sentimientos de soledad y pérdida de la autoestima.

3. Ser víctima de abuso. El abuso o violencia puede presentarse de diferentes maneras en nuestra vida, es decir, a través de golpes, ofensas, violaciones sexuales, críticas destructivas, ignorar las necesidades básicas o afectivas, entre otras. Sea cual sea la forma en que se presente el abuso, este deja una cicatriz emocional en la persona que lo sufre.

Al atravesar experiencias  y situaciones como estas, la persona puede ir formándose una opinión negativa sobre sus habilidades, sus emociones, su apariencia, su inteligencia o sus capacidades.

Las consecuencias en una persona con autoestima baja, pueden ser muy variantes, por ejemplo, hay personas que pueden involucrarse en relaciones tóxicas o violentas, ya que aceptan las circunstancias que creen merecer. Algunas otras personas, pueden tomar medidas drásticas para recuperar su autoestima, como son los desordenes alimenticios, cirugías peligrosas, compañías no adecuadas, etc. En algunos otros individuos, comienza a ser tan grande su sentimiento de incapacidad, que simplemente se rinden o dejan de intentar hacer las cosas, esta situación, muchas veces termina en depresión y lamentablemente en suicidios. Para otras personas, la escapatoria más sencilla es desviar la atención de sí mismo y centrarla en alguna actividad, como las adiciones. De tal manera que, cada persona puede llegar a tener consecuencias únicas, pero a fin de cuentas, destructivas para ella.

Es importante resaltar que, la autoestima se construye día a día, y que las personas a nuestro alrededor juegan el papel más importante. Si con frecuencia nos estimulan y resaltan nuestras habilidades, capacidades, características físicas, etc. y nos motivan a superarnos y lograr nuestras metas, desarrollaremos una autoestima positiva.