Una vez, un joven muchacho recibió una cruel decepción de la vida, él era un soñador, anhelaba con todas sus fuerzas lograr su más grande sueño: convertirse en un jugador de beisbol profesional, adoraba ese deporte, pero por azares del destino, su sueño se quedó en eso, sólo sueño, pues antes de arrojarse a cumplir su sueño, tejió toda una maraña de posibilidades siniestras, cuando se decidía a entrar a un equipo siempre pensaba: “y ¿qué tal si me rechazan?, sería muy decepcionante, mejor no lo hago”, fueron tantas veces las que imaginaba los peores escenarios, que la única vez que se aventuró a entrar a un equipo, el entrenador lo rechazó, y le dijo que era un pésimo jugador. Después de eso, el joven se convenció de que de nada valía la ilusión, si al final habría fracasos que duelen, “siempre espera lo peor, así no sufrirás jamás”, se dijo a sí mismo.
¿Cuántas veces en la vida has creado un filtro negativo para no tener expectativas positivas y así no decepcionarte?, los seres humanos estamos expuestos a tener vivencias positivas y otras dolorosas, desde que somos pequeños, vamos guardando experiencias que forjan nuestro carácter y la forma en que vemos la vida, de las experiencias negativas, vamos adquiriendo herramientas inconscientes como creencias ocultas para mantenernos a salvo, pues hemos vivido malas experiencias que no veíamos venir, y de ahí nacen creencias que nos bloquean, pero de manera inconsciente creemos que nos mantienen a salvo. Ese filtro negativo que ponemos a la vida, nos impide soñar y arrojarnos a cumplir nuestros sueños, pues provienen del miedo, creamos en nuestra mente los peores escenarios, los vivimos en nuestra mente, y eso sólo nos hace daño. Crecimos con la idea arraigada que dice “piensa mal y acertarás”, pero gracias a esa frase ¿de cuántas posibles relaciones, amistades, noviazgos, negocios exitosos, sueños te has privado?
Crear un filtro negativo a la vida implica dos problemas, el primero de ellos es que nuestra mente inconsciente no distingue entre lo que imaginas, y lo que realmente vives, entonces, al empezar a reproducir una película dramática en la que vives decepciones y ocurren situaciones indeseables solamente nos estamos torturando al sufrir por cosas que no han ocurrido todavía, no sabemos si van a pasar, pero al recrearlo, eso sólo te hace sentir dolor, ansiedad y estrés, ¿te das cuenta?, queriendo evitar un sufrimiento futuro, solamente te estás provocando sufrimiento y por otro lado le das poder a eso que no quieres que suceda, pero que esperas que pase, para evitar decepcionarte si tus sueños no se cumplen.
El segundo problema estriba en el hecho de que nuestros pensamientos son energía, ya he explicado esto en otros textos, y nuestra energía implica una fuerza magnética de lo que le es afín, es decir que si constantemente estás creando ideas de fracaso, ideas de dolor, o decepción, esa energía va a atraer a ti justo eso que estás pensando, porque tú mismo lo estás atrayendo, cómo te dije, el universo no sabe distingue suposiciones de deseos o declaraciones, y siempre te va a enviar aquello que es afín a lo que tú generas, así que ese refrán “piensa mal y acertarás” sin duda se cumplirá, pero no porque te ayude a no sufrir o a prevenir, sino porque tú mismo eres responsable de esa calamidad al pensar mal constantemente, sólo estás recibiendo circunstancias que tú mismo estás generando, le estás dando a la vida una calidad negativa.
¿A dónde quiero llegar con esto?, simplemente a decirte que pensar mal sólo te limita, vivir con sueños y poner todo tu empeño en cumplirlo te da un motivo para vivir, pero además, visualizar las cosas de manera positiva cambiarán tu forma de ver la vida, tu energía cambiará, se elevará tu frecuencia y de esta manera las cosas se te darán con mayor facilidad, piensa bien y acertarás.
Si tú crees que todo saldrá mal, que la vida es injusta, que siempre te irá mal (con tal de no sufrir decepciones), créeme la vida te va a regalar justo lo que piensas, lo que imaginas, en cambio si tú piensas que todo saldrá bien, que cosas buenas sucederán, que tus sueños se cumplen, la vida te responderá justo cómo tú lo piensas. Entonces, piensa mal y acertarás, y piensa bien y acertarás.
¿Cómo lograr el cambio para protegerte y no caer en la inconsciencia de los filtros negativos que todos los seres humanos tendemos a poner?, es muy sencillo, pero requiere trabajo constante, cuando te fijes una meta, y llegue a ti ese pensamiento a manera de película negativa, identifícalo, y no lo dejes continuar, dile a ese pensamiento: “hoy no te necesito, hoy me toca ser feliz” e inmediatamente cámbialo por una idea constructiva y positiva.