La estrategia de combate al robo de combustible que emprendió el Gobierno federal era necesaria, pero para el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Juan Pablo Castañón, no se tomaron las medidas de apoyo necesarias para evitar el desabasto que se registra actualmente en las regiones Occidente y Centro.
“Es muy importante la acción que se ha tomado para combatir el huachicoleo, (pero) a la vez es muy importante que no haya desabasto porque se pararía la actividad del país y, por ello, es urgente que la autoridad tome las medidas necesarias”, explicó al salir de la Reunión Anual de Embajadores y Cónsules.
En su opinión, la situación actual coloca en riesgo la distribución de mercancías en ciertos estados del país, e incluso el abastecimiento de energía. Se trata, dijo, de una “crisis que puede agravarse” y que si bien el objetivo final de combatir el robo es muy importante, también lo es asegurar el abasto de combustibles. “Hemos buscado respuesta de la Secretaría de Energía para un plan específico que dé confianza y certeza”.
El Coordinador del Consejo de Cámaras Industriales de Jalisco (CCIJ), Daniel Curiel, coincidió en que la escasez puede afectar el reparto de mercancías si la situación actual se prolonga, sobre todo de bienes perecederos como lácteos, panificación y cárnicos, aunque la autoridad les dijo que a partir de hoy habrá solución.
Gustavo de Hoyos, presidente nacional de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), también expuso su opinión, aunque él lo hizo a través de Twitter. Allí, afirmó que “decir que no hay desabasto es una burda mentira”, ya que “millones de personas y miles de empresas dan testimonio de ello”.
Y aunque sostuvo que también Coparmex apoya el plan contra el huachicoleo, e incluso lo ve como “una decisión impostergable y valiente”, consideró que su planeación es “pésima” y la implementación “torpe”.
Ayer, durante una entrevista en la Ciudad de México, el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, calculó que, de mantenerse el abasto de 94 mil barriles diarios de combustible que prometió Petróleos Mexicanos (Pemex), pasarían hasta 10 días más para normalizar el flujo.
“Me da gusto que se esté combatiendo un problema como el del huachicol, pero me parece que no se midieron las consecuencias y el impacto que iba a tener en los ciudadanos una medida que, si bien me parece plenamente justificada, creo que está siendo muy mal implementada”.
El Informador