De locura los precios de la gasolina en Italia y España; Pedro Sánchez culpa a Putin

En Italia, en estos días, durante la Guerra de Rusia-Ucrania han aumentado 30 centavos por litro en solo unos días.

Por lo que la pregunta es si ¿Vladímir Putin es el culpable de la escalada de precios?

Sin embargo, en el caso particular de Italia, hay un apartado sobre los impuestos especiales que juegan un papel decisivo y que dentro de este rubro se financian numerosas medidas económicas de los gobiernos a lo largo de los años.

Actualmente los impuestos especiales, por cada litro de gasolina, ascienden a 0,728 euros, 0,617 euros el gasóleo y 0,147 euros el GLP. El otro componente, que varía según el precio, es el IVA que es del 22% y a 7 de marzo pesaba 0,35 euros la gasolina, 0,31 el gasóleo y 0,153 el GLP. Sin estos dos componentes, el precio del combustible sería de 87 céntimos la gasolina, 88 el gasóleo y 55 céntimos el GLP.

En tanto, cabe precisar que el impuesto especial se compone a su vez de dos partes: una parte financia 19 partidas del presupuesto del Estado y la otra corresponde al impuesto de fabricación sobre los combustibles.

En 2018, el secretario de la Liga Matteo Salvini había lanzado una batalla por la abolición de los impuestos especiales o al menos una parte de ellos pero luego, una vez en el gobierno, no lo hizo. Hay una razón Desde 1995, los impuestos especiales individuales ya no existen: de incrementos extraordinarios han pasado a ser ordinarios y estructurales.

El impuesto especial, por tanto, se define de forma unitaria y los ingresos resultantes no financian actividades concretas del presupuesto sino el conjunto. Básicamente, todos los artículos enumerados ya no existen individualmente, incluso si en cada emergencia ese precio unitario se incrementa en unos centavos para financiar intervenciones extraordinarias.

Por otro lado en España, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, aseguró que los precios de la energía, son única responsabilidad de Putin y de su guerra en Ucrania.

Sin embargo, los precios ya estaban disparados antes de que Putin declarara la guerra a Ucrania. De hecho, en enero de 2022 se han mantenido en el 6,1% y en febrero se han disparado al 7,4%. Dado que la invasión a Ucrania comenzó el 25 de febrero, los expertos calculan que, como máximo, 1,5 puntos de este repunte se deben a la guerra.

Sólo un 4% de las importaciones que hace España de petróleo proceden de Rusia, siendo otros países como Alemania o Italia mucho más dependientes del combustible ruso.

Algunos economistas culpan también de la inflación a las políticas económicas, monetarias y fiscales- excesivamente laxas de los últimos años, que han contribuido a un gasto excesivo y a una subida de los precios.

Pedro Sánchez sabe que la guerra agravará la inflación, por lo que es tentador para él culpar a Putin de este problema que empobrecerá a la población e intentar reescribir la historia de lo que realmente está sucediendo. Más aún sabiendo que la guerra ralentizará el crecimiento económico en España, con lo que se podría retrasar aún más la recuperación de los niveles pre-pandemia.

Es una tarea complicada, porque una vez que los precios se desbocan es muy difícil contenerlos. Los bancos centrales pueden tener un papel clave para intentarlo, endureciendo su política monetaria antes de lo previsto, pero eso podría enfriar la recuperación, así que tendrán que medir bien los movimientos y sus tiempos.

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