América Latina y el Caribe viven un riesgo excepcionalmente alto a disturbios sociales, derivado de los choques inflacionarios en los que está inmersa, cuyo impacto se da sobre una población que apenas estaba recuperándose del impacto de la pandemia de Covid-19, reconoció este martes el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Se ha presentado una erosión de los ingresos reales de la población, sobre todo el de los más vulnerables. Hay un riesgo de cohesión social y disturbios explicó el Director para el Hemisferio Occidental del FMI, Ilan Goldfjan.
En conferencia de prensa, precisó que en los países de la región tenemos un choque de inflación sobre otro. El derivado de la invasión de Rusia sobre Ucrania que cohabita sobre el generado por la pandemia. A este contexto se tiene que agregar que los hogares están saliendo del efecto económico que generó la emergencia sanitaria.
Desde Washington, sugirió a los gobiernos mantener como temporales sus estrategias de alivio a la crisis de los precios de alimentos y energéticos, con el objeto de que no se vuelvan una carga para las finanzas públicas.
Sin mencionar específicamente el plan de subsidios a los precios de gasolina que está dirigiendo el gobierno mexicano, subrayó la importancia de mantener como “temporal” las estrategias de alivio para la población.
Inflación y pobreza
El funcionario destacó que la inflación suele tener un mayor impacto en las familias de menos recursos. De hecho, refirió datos del mismo FMI para evidenciar que la escalada de precios afecta entre 2 y 3 veces más a los habitantes que viven en situación de pobreza que al resto de la población.
Y en este momento en particular, donde los precios de alimentos y energéticos son los más presionados, los países y personas de escasos recursos se ven más impactados, pues suelen destinar más de la mitad de su gasto a estos bienes.
Ante este panorama, la recomendación del FMI es proteger a los más vulnerables a través de transferencias económicas de la red de seguridad social. Y si los países no cuentan con esta herramienta, sugiere utilizar otras medidas para suavizar el impacto del aumento de precios.
Sí tiene consecuencias fiscales, pero la clave es que sea temporal para evitar un mayor costo fiscal.
Salidas de capital y crecimiento lento
El funcionario detalló que otro riesgo que afecta a los países de la región es el endurecimiento de las políticas monetarias de economías avanzadas como Estados Unidos.
Cuando los bancos centrales como el de Estados Unidos incrementan las tasas de interés, se presentan salidas de capital de mercados emergentes y viene una depreciación de las monedas así como condiciones de financiamiento más difíciles, describió.
Ante la presión inflacionaria, es de esperarse que los bancos centrales locales también restringirán su política monetaria y a la larga tendrá impacto en la actividad económica. De ahí la revisión a la baja en las expectativas económicas, asentó.
Tomado de Infobae
Con información de El Economista