Michelle Arellano, la niña mexicana con coeficiente intelectual similar al de Mark Zuckerberg y Albert Einstein

Pocas veces el mundo ha visto surgir desde sus rincones más recónditos a niños y niñas genio cuya capacidad intelectual sorprende y los perfila para convertirse en algún importante personaje histórico cuyas aportaciones queden para la posteridad. Recientemente en México, la inteligencia y talento académico que la menor Michelle Arellano ha demostrado poseer a sus escasos diez años ha llamado la atención de la ciudadanía y de la prensa internacional.

Originaria de la calurosa ciudad de Tuxtla Gutiérrez en el estado de Chiapas, la pequeña Michelle posee un coeficiente intelectual (IQ) de 158 puntos, dos menos que el físico mundialmente conocido, Albert Einstein y aproximadamente seis más que el del CEO de Meta, Mark Zuckerberg.

Dicha especial característica le ha valido a la pequeña de 10 años ser considerada como una de las niñas prodigio o genio que México ha visto nacer, no obstante, a su corta edad, Michelle Arellano ya se prepara para cursar estudios de medicina en la Universidad de Massachusetts en Estados Unidos.

De acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), aquella peculiar característica que posee la menor de diez años se presenta únicamente en tres de cada 100 niños, por lo que, además de ser un orgullo mexicano, indudablemente Michelle Arellano cumple con todas y cada una de las características de ser una niña genio.

Una niña pequeña con grandes sueños

En entrevista con la agencia de noticias EFE, la pequeña Michelle aseguró que uno de sus más grandes sueños es convertirse en doctora, sin embargo, su talento y capacidades no solo podrían limitarse a dicha profesión por lo que también está en sus planes estudiar biología marina e, incluso, convetirse en actriz.

Respecto a la medicina, Michelle Arellano tiene ahora la oportunidad de estudiar en una de las universidades de más alto reconocimiento en Estados Unidos, estadía que la niña quiere aprovechar para cumplir su sueño de encontrar la cura del cáncer y el autismo.

Michelle Arellano tenía tan solo un año y medio de edad cuando aprendió a hablar inglés, no obstante, su inquietud y habilidades la llevaron a dominar también a su corta edad idiomas como el francés, alemán e italiano.

A sus cuatro años, la talentosa niña ya sabía leer y escribir, aprobó la primaria, secundaria y recientemente la prueba del Centro Nacional para la Evaluación de la Educación Superior (CENEVAL) para certificar su preparatoria.

De Tuxtla para Massachusetts

Será durante este mes de agosto que la pequeña Michelle Arellano comenzará a cursar sus estudios universitarios en el estado de Massachusetts en Estados Unidos.

Aunque por las condiciones de su caso los dos primeros años de carrera tendrá que atenderlos vía remota, los siguientes ya tendrá que cursarlos presencialmente en el campus de la Universidad de Massachusetts.

Además de sus inegables habilidades académicas, Michelle Arellano también se considera una artista puesto que disfruta de dibujar, pintar y tocar el piano. Adicionalmente, la pequeña también ha desarrollado gusto por deportes como natación, baloncesto y taekwondo, en los que también ha destacado.

Un país que no está preparado

Pese a que Michelle Arellano ha demostrado a su corta edad ser una niña excepcional y especial, el camino que ha tenido que recorrer a lado de su madre, Karina Guillén Cruz, no ha sido sencillo.

En entrevista con la agencia de noticias EFE, la mamá de la menor -que es cirujana de profesión- relato las múltiples dificultades que ha tenido que enfrentar por las condiciones de su hija, comenzando porque la información sobre los niños genio en México es escaza.

No obstante y convencida de apoyar a su hija, Karina Guillén consultó a especialistas que la apoyaron para orientarla en poder gestionar las grandes habilidades e inteligencia de la pequeña.

Pese al esfuerzo, la familia se tuvo que enfrentar también al hermetismo del sistema educativo del país pues, contrario a lo que se pudiera pensar, Michelle Arellano fue rechazada en cinco escuelas de Tuxtla Gutiérrez bajo el argumento de que los maestros no podían lidiar con su inteligencia.

Dicha situación orilló a la madre de Michelle a presionar a las autoridades de la Secretaría de Educación del estado de Chiapas para que la pequeña fuera aceptada en una escuela y, posteriormente, a que la apoyaran en que subieran de grado a la niña que por su rápida habilidad para aprender, se aburría en las clases.

Fue así como la dependencia gubernamental aceptó las peticiones de Karina Guillén y la pequeña Michelle logró pasar de cuarto año de primaria a sexto. Después con una evaluación única acreditó la primaria en noviembre de 2021 y rumbo a marzo de 2022 la secundaria. El pasado 4 de julio obtuvo la acreditación de su preparatoria con tan solo 10 años de edad.

El impacto que el caso de la niña genio, Michelle Arellano, ha generado se ha extendido no solo en el ámbito académico sino que ahora junto con su familia buscan crear una red de apoyo y orientación para los padres de niños superdotados.

Tomado de Infobae

Con información de EFE