Cuatro presuntos integrantes de una familia fueron asesinados en San Pedro Tlaquepaque, Jalisco, y sus cuerpos aparecieron con huellas de violencia en la caja de una camioneta por presuntas disputas de tierras.
De acuerdo con reportes preliminares, se trata de Rubén “B”, así como su hijo del mismo nombre, además de María Esther “P” y Enrique “V”. Las primeras investigaciones apuntan a venganzas porque fueron favorecidos para poseer un predio en San Sebastiansito.
La Fiscalía de Jalisco confirmó que las cuatro personas fueron localizadas durante la madrugada en la batea de un automotor Ford Ranger en color blanco, modelo 2005. Pero informes locales señalaron que hombres armados llegaron por sus víctimas y las secuestraron horas antes, mientras se encontraban en una casa.
Supuestamente, la disputa derivó luego de que un juzgado determinara otorgar un terreno en la misma delegación donde sucedieron los hechos. Esa decisión se concretó este 3 de agosto, pero las autoridades ministeriales no han ofrecido mayores detalles para reiterar el parentesco y la posible causa.
Luego de tener el reporte a los servicios de emergencia, policías municipales de San Pedro Tlaquepaque arribaron al Camino Real a Colima, en el cruce con Colón, en la colonia Nueva Santa María. Ahí estaban el señor Rubén, su hijo y las otras dos personas.
Los agentes acordonaron la zona y dieron aviso a la fiscalía de la entidad. Después acudieron agentes del Ministerio Público y de la Policía de Investigación para dar inicio a los trabajos en gabinete y campo.
“De los primeros datos obtenidos se desprende que el vehículo cuenta con reporte de robo del pasado 21 de julio y las víctimas, tres hombres y una mujer, a simple vista presentan huellas de violencia”, informó la dependencia.
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