La dinastía Del Mazo: el grupo que podría salvar o matar al PRI en Edomex

El Estado de México está próximo a iniciar la renovación de su ejecutivo local, por lo que los partidos políticos han comenzado con el desarrollo de sus procesos internos para elegir a las personas que serán candidatas a la gubernatura de la entidad, tanto así que el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) ya eligió a la aún titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Delfina Gómez Álvarez, para buscar quedarse con el bastión histórico del PRI.

Ante lo cual, la gran incógnita recae en conocer qué es lo que hará el Partido Revolucionario Institucional (PRI), es decir, si irá a la competencia electoral de forma individual o en conjunto con la coalición Va por México -a lado del Partido Acción Nacional (PAN) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD)-, debido a que es el instituto político que ha gobernado el estado desde finales de la década de los veinte del siglo pasado.

Con este panorama es que muchos analistas, así como ciudadanos, han expresado que será el actual gobernador Alfredo del Mazo Maza quien decidirá cuál será el destino del tricolor, puesto que el actual presidente del PRI, Alejandro Alito Moreno Cárdenas, ha enfrentado escándalos políticos que lo han debilitado como cabeza del tricolor.

No obstante, lo que parecerían comicios de rutina para el tricolor, se han vuelto en una carrera contra reloj, pues perder la entidad del centro del país significaría, no solo dejar de gobernar el estado con más ciudadanos y que aporta más presupuesto a la causa partidaria, sino quedar relegado del escenario político mexicano.

Aunado a la difícil situación que vive el partido ante la perdida del poder, han nacido dudas sobre la lealtad de Alfredo del Mazo con su partido, puesto que se le ha observado cercano al actual presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), tal acción ha provocado que muchos teman que se puedan replicar casos como el de Claudia Pavlovich, exgobernadora de Sonora, y de Quirino Ordaz, exmandatario de Sinaloa, quienes aceptaron cargos diplomáticos en la Cuarta Transformación, lo que ocasionó su expulsión del tricolor.

La diferencia con los casos antes citados es que el actual mandatario mexiquense no solo representa a una fracción dentro del partido, sino, más bien, a toda una dinastía que se consagró en el Estado de México y que tres generaciones directas han gobernado la entidad, además de otras ramas familiares en donde se encuentra, incluso, el expresidente Enrique Peña Nieto.

La dinastía Del Mazo

Y es que hablar del apellido Del Mazo en el Estado de México es narrar parte de la historia política de la entidad, puesto que es uno de los apellidos presentes en 1929 cuando se fundó el Partido Nacional Revolucionario (PNR), aunque también se les ha colocado como una de las principales fracciones del famoso Grupo Atlacomulco.

Sin embargo, la historia inició con Alfredo del Mazo Vélez quien se convirtió en el primer gobernador del tricolor ya como PRI; el mexiquense gobernó la entidad entre 1945 y 1951 debido, se cuenta, a su cercanía con su antecesor, el histórico Isidro Fabela, por lo que fue fuertemente apoyado en las elecciones; al término de su administración, se volvió cercano al presidente Miguel Alemán Valdés, participó en su gabinete, incluso se creyó que el dedazo presidencial sería a su favor, pero el elegido fue Alfonso Ruíz Cortines.

La historia continuó con su hijo, Alfredo del Mazo González, el cual gobernó la entidad de 1981 a 1996; su administración tuvo como punto álgido, entre otros más, las explosiones de San Juanico el 19 de noviembre de 1984, la cual causó la muerte de más de 500 personas.

Actualmente administra la entidad Alfredo del Mazo Maza, quien asumió el cargo en 2017 y concluye en 2023, luego de unos comicios complicados en donde tuvo un reñido triunfo frente a Morena; no obstante, los altos índices de violencia y agresiones a mujeres han hecho que el futuro del PRI se tambalee en la localidad.

Finalmente, en la familia Del Mazo también se encuentran otros personajes que gobernaron el Estado de México como Arturo Montiel (1999-2005), quien es primo de la madre de Enrique Peña Nieto (2005-2011), quien a su vez es primo de Del Mazo Maza, debido a que su padre, Gilberto Enrique Peña Del Mazo, era primo de Del Mazo González.

Elecciones 2023

Con todo el bagaje familiar e histórico ya referido es como recae la responsabilidad sobre Alfredo del Mazo Maza de apostar a una sola causa en la entidad que actualmente gobierna, puesto tiene en sus manos no solo unir a la dinastía a la cual pertenece, también a los demás grupos poderosos del PRI en Edomex como el grupo Atlacomulco, en pro de mantener al Revolucionario Institucional al frente del ejecutivo local y con esperanza electoral rumbo al 2024, año de la sucesión presidencial.

O, dar un giro a la trama, “traicionando” la herencia revolucionaria que lo llevó al poder y aliarse al movimiento que encabeza Andrés Manuel López Obrador, dándole así al PRI la estocada final para que continue perdiendo más poder, adelantando su desaparición.

Con información: Infobae.com 

Tips al momento

Cerrará López Obrador con el mayor déficit fiscal en cuatro sexenios

De acuerdo con Yolanda Morales, en su colaboración para el periódico El Economista, el actual gobierno tendrá el 2024 el mayor déficit fiscal en un año electoral y el más alto en al menos cuatro sexenios, según informa con base a datos del Fondo Monetario Internacional.

Destaca que la actual administración Federal tendrá un déficit de 5.9 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), al considerarlo el más alto, cuando menos, desde el año 2000, al señalar, que el antecedente más cercano de un déficit mayor al 4 por ciento, lo tenía Enrique Peña Nieto, en el 2014, cuando llegó al 4.54 por ciento del PIB.

Según expone en su texto, luego de que se mantuvo como uno de los gobiernos más prudentes en el manejo de cuentas fiscales durante la pandemia, el actual, terminará con el déficit fiscal más alto.

Con Felipe Calderón, según lo expone, el mayor déficit presupuestario fue en 2019 y alcanzó el 4.3 por ciento del PIB; mientras que con Vicente Fox, en 2003, llegó al 2.36 por ciento del Producto Interno Bruto.

Lo anterior, señala, que de acuerdo a un reporte del Fondo Monetario Internacional, en el último año, la deuda del gobierno, promediará 55.6 por ciento del PIB, menor a 58.5 por ciento del Producto Interno Bruto que representó en 2020, en plena pandemia.

Señala que los expertos del FMI proyectan que la deuda general del gobierno mexicano se mantendrá estable durante 2025 y 2026. no obstante, tenderá al alza en 2027 para alcanzar, según expuso, un máximo del 56.1 por ciento del PIB para el 2029, aumento que atribuye al pago de intereses. Así los pronósticos.


IEE en turismo político 

Varios vieron inconveniente la presencia de la Consejera Presidenta del Instituto Estatal Electoral, Yanko Durán Prieto en un evento del  Plan Estratégico de Juárez y esto debido a que en este mismo encuentro hubo actores políticos de los que dicen, sólo salen a hacer ruido en cada proceso electoral.

La inconformidad de esta asistencia de la consejera del IEE llegó a grado de señalar que el proceso electoral ya inició y que si bien todo lo esta manejando el INE, al menos el IEE debería revolver un poco de trabajo al glamour y al turismo político.

A esto añaden que mientras el personal, la magistrada y magistrados del Tribunal Estatal Electoral se encuentran encerrados las 24 horas tratando de sacar adelante las impugnaciones por las inconformidades en el registro de candidaturas, por su parte los consejeros y consejeras del IEE disfrutan del tiempo electoral.

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Destaca que la actual administración Federal tendrá un déficit de 5.9 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), al considerarlo el más alto, cuando menos, desde el año 2000, al señalar, que el antecedente más cercano de un déficit mayor al 4 por ciento, lo tenía Enrique Peña Nieto, en el 2014, cuando llegó al 4.54 por ciento del PIB.

Según expone en su texto, luego de que se mantuvo como uno de los gobiernos más prudentes en el manejo de cuentas fiscales durante la pandemia, el actual, terminará con el déficit fiscal más alto.

Con Felipe Calderón, según lo expone, el mayor déficit presupuestario fue en 2019 y alcanzó el 4.3 por ciento del PIB; mientras que con Vicente Fox, en 2003, llegó al 2.36 por ciento del Producto Interno Bruto.

Lo anterior, señala, que de acuerdo a un reporte del Fondo Monetario Internacional, en el último año, la deuda del gobierno, promediará 55.6 por ciento del PIB, menor a 58.5 por ciento del Producto Interno Bruto que representó en 2020, en plena pandemia.

Señala que los expertos del FMI proyectan que la deuda general del gobierno mexicano se mantendrá estable durante 2025 y 2026. no obstante, tenderá al alza en 2027 para alcanzar, según expuso, un máximo del 56.1 por ciento del PIB para el 2029, aumento que atribuye al pago de intereses. Así los pronósticos.


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