CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El canciller Juan Ramón de la Fuente afirmó que ningún mexicano estará detenido en la base militar de Guantánamo en Cuba, esto luego que el gobierno de Estados Unidos diera a conocer que planea trasladar a migrantes detenidos a esa prisión militar.
Tras su reunión en la plenaria de los senadores morenistas, el canciller detalló que, desde que se supo de la decisión del gobierno estadounidense de enviar migrantes a la prisión militar, envió una nota diplomática para que todos los mexicanos fueran regresados al país.
“A ver, sobre ese tema de Guantánamo, les puedo decir que ningún mexicano, ninguna mexicana va a ir allá, bajo ninguna circunstancia.
“Desde que se dio la noticia, se envió a la Embajada de Estados Unidos una nota diplomática, justamente, diciendo que aquí vamos a recibir a todas y a todos los mexicanos que así lo deseen, y eso es lo que ha ocurrido hasta ahora y es lo que va a seguir ocurriendo”, explicó.
El titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) también afirmó que está en constante comunicación con el secretario de Estado, Marco Rubio, con quien dijo tiene un diálogo franco.
"Con Marco Rubio hemos tenido conversaciones y vamos a seguirlas teniendo, ha habido un diálogo franco, un diálogo abierto, cordial, de hecho, él está ahora en Centroamérica, pero seguramente tendremos, nuevamente, una conversación”, detalló.
Con información de Proceso.
Ante la crisis y colapso que enfrenta el servicio de Pensiones Civiles del Estado, los derechohabientes de la institución han tenido que recurrir al intercambio de medicamentos entre ellos mismos.
A través de distintas plataformas de comunicación entre los grupos de derechohabientes, han expresado que no queda de otra más que apoyarse entre ellos mismos.
Sumidos en el coraje e impotencia, han decidido preparar algunas acciones legales contra la institución, además de la presión pública.
Ante la crisis y colapso que enfrenta el servicio de Pensiones Civiles del Estado, los derechohabientes de la institución han tenido que recurrir al intercambio de medicamentos entre ellos mismos.
A través de distintas plataformas de comunicación entre los grupos de derechohabientes, han expresado que no queda de otra más que apoyarse entre ellos mismos.
Sumidos en el coraje e impotencia, han decidido preparar algunas acciones legales contra la institución, además de la presión pública.