Tomar medicamentos para salud mental aumenta riesgo de padecer afecciones por calor: estudio

Aunque el calor extremo puede afectar a todo tipo de personas, algunos están más expuestos a sufrir problemáticas severas por las altas temperaturas.

La intensta exposición al sol, donde se pasan horas debajo de los rayos, ha llegado a causar que cientos de personas lleguen a desmayarse, perder conocimiento y, en casos severos, una enfermedad relacionada al calor podría causar la muerte.

El calor también puede afectar condiciones médicas existentes, como las enfermedades cardíacas; entre las personas más expuestas a experimentar riesgos severos, se encuentran adultos mayores que viven solos, bebés o niños pequeños, personas embarazadas o lactantes; aquellos cuyo físico se ve afectado por presión arterial o enfermedades pulmonares y, finalmente, quienes han tomado medicamentos para tratar condiciones mentales.

Esto, lleva a diversas personas a padecer trastornos psicológicos, elevar tasas de suicidio y aumentar las hospitalizaciones psiquiátricas.

“Las olas de calor están empeorando con el cambio climático, debemos tener cuidado cuando los medicamentos se mezclan con el calor. Demasiado calor puede hacer que una droga que de otro modo sería segura y efectiva sea peligrosa”, agregó también Aaron Bernstein, pediatra y director interino de la Escuela de Educación Pública TH Chan de Harvard.

“Todos los que toman medicamentos, ya sean de venta libre o recetados, deben tener en cuenta que sus medicinas pueden ponerlos en riesgo una vez que llegue el verano”, dice.

Mientras, los inhibidores selectivos de la recapatación de serotonina, es decir, antidepresivos como fluoxetina, escitalopram, duloxetina, entre otros, provocan que se sude más, causando deshidratación. De igual manera, los medicamentos antipsicótcos pueden obstaculizar la capacidad del cerebor para regular la temperatura corporal.

“Para muchas personas que toman medicamentos, trabajar al aire libre puede no ser una opción. Si sabe que tiene que estar afuera, asegúrese de que su médico sepa que su trabajo requiere que esté afuera. La dosis puede ajustarse en función de esa exposición, ya sea en términos de cuánto o cuándo la tome”, aseguró el experto.

Según un estudio proporcionado por Better Health, las personas jóvenes son más propensas al estrés por calor, porque su cuerpo puede no adaptarse bien a los cambios de temperatura. Asimismo, si están tomando medicinas para tratar salud mental, puede que interfieran con la capacidad de su cuerpo para regular la temperatura.

Por otro lado, el aumento de los cambios climáticos, como el calor extremo o incendios forestales, afectan, de por sí, la salud mental de los seres humanos. En dichos estudios, se reveló que incendios forestales, sequías, calor y la humedad tienen posibles consecuencias en la estabilidad emocional humana.

La poca investigación que hay en este campo hace “imposible estimar la escala del problema”, dice Ying Zhang, profesor titular de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Sydney. “Sin embargo, es seguro que el cambio climático traerá más problemas de salud debido a los medicamentos”, sentenció.

“Las escuelas de medicina no les enseñan a los médicos sobre estos riesgos, en parte porque los riesgos son nuevos... Esto se debe a que el cambio climático ha traído un calor sin precedentes. La gente está experimentando un calor como nunca antes en nuestra historia. En el pasado, no teníamos que preocuparnos por los medicamentos y el calor en el verano”, concluyó Bernstein.

Para evitar posibles enfermedades relacionadas a las intensas temperaturas, expertos recomiendan mantenerse hidratados, además de usar ropa fresca y cómoda, así como no exponerse por tanto tiempo a las horas del sol; de hacerlo, exhortan a usar la protección necesaria.

Con información de Vanguardia