
EFE.- Un juez federal estadounidense ordenó este jueves al gobierno de Donald Trump que reintegre en sus puestos a miles de empleados públicos en periodo de prueba despedidos durante las primeras semanas de administración.
La orden del juez William Alsup, con tribunal en San Francisco (California), afecta a los trabajadores despedidos en los departamentos de Defensa, Energía, Tesoro, Interior, Agricultura y Asuntos de los Veteranos.
La orden está dirigida a la Oficina de Gestión de Personal (OPM, en inglés), responsable de los despidos. El juez falló que la OPM carece de autoridad legal para ordenar este tipo de despidos.
La orden de Alsup es el mayor revés legal hasta la fecha a los planes de despidos masivos de Trump y Elon Musk.
Como parte de su estrategia para recortar drásticamente el sector público, Trump, con el apoyo del llamado Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) dirigido por Musk, enfocó sus primeros esfuerzos en los empleados en periodo de prueba.
En el gobierno federal, el periodo de prueba tiene una duración habitual de un año y se aplica tanto a nuevos empleados como a aquellos que han sido ascendidos o que han cambiado de puesto dentro de la administración.
Según CNN, han sido despedidos hasta la fecha al menos 103 mil 452 empleados públicos desde que Trump llegó al poder el 20 de enero, muchos de ellos en periodo de prueba.
Con información de Latinus

Trascendió que en la atención de la dirección estatal de Conagua a los productores agrícolas que se manifestaron en las oficinas centrales, hubo infiltrados de Gobierno Estatal y otros personajes que trataron de reventar la reunión.
Según los presentes al estar el delegado Román Alcántar dialogando en una primera reunión con los quejosos, un sujeto constantemente interrupia al director y comenzó a agredirlo hasta que este se retiró.
Horas más tarde en una segunda reunión, un sujeto comenzó a tomar fotografías, por lo que rápidamente uno de los manifestantes comenzó a cuestionarlos y se identificó como personal de la Secretaría General de Gobierno, quien ya se ha visto en varios eventos y manifestaciones como infiltrado.
Por cierto, tras horas de diálogos se llegó al acuerdo de agregar mesas de atención para los quejosos.

La Junta de Coordinación Política, habrá de designar a los integrantes del Comité del recién acordado “Club del Libro del Congreso del Estado de Chihuahua” como un espacio permanente para la promoción de la lectura.
El anuncio oficial fue aprobado por los integrantes de la Junta de Coordinación Política, siendo una propuesta impulsada por el personal que colabora para la diputada de Morena, Brenda Ríos.
Este club de lectura se reúne los viernes en el Congreso del Estado desde el pasado 3 de octubre.

Trascendió que en la atención de la dirección estatal de Conagua a los productores agrícolas que se manifestaron en las oficinas centrales, hubo infiltrados de Gobierno Estatal y otros personajes que trataron de reventar la reunión.
Según los presentes al estar el delegado Román Alcántar dialogando en una primera reunión con los quejosos, un sujeto constantemente interrupia al director y comenzó a agredirlo hasta que este se retiró.
Horas más tarde en una segunda reunión, un sujeto comenzó a tomar fotografías, por lo que rápidamente uno de los manifestantes comenzó a cuestionarlos y se identificó como personal de la Secretaría General de Gobierno, quien ya se ha visto en varios eventos y manifestaciones como infiltrado.
Por cierto, tras horas de diálogos se llegó al acuerdo de agregar mesas de atención para los quejosos.

La Junta de Coordinación Política, habrá de designar a los integrantes del Comité del recién acordado “Club del Libro del Congreso del Estado de Chihuahua” como un espacio permanente para la promoción de la lectura.
El anuncio oficial fue aprobado por los integrantes de la Junta de Coordinación Política, siendo una propuesta impulsada por el personal que colabora para la diputada de Morena, Brenda Ríos.
Este club de lectura se reúne los viernes en el Congreso del Estado desde el pasado 3 de octubre.
