La diputada del PAN, Blanca Gámez Gutiérrez, propuso reforma a la Constitución Política del Estado de Chihuahua con el objeto de incorporar el lenguaje incluyente en el texto constitucional.
La situación de la mujer ha avanzado en algunos aspectos importantes en el último decenio, aunque los progresos no han sido homogéneos, persisten las desigualdades entre mujeres y hombres y sigue habiendo obstáculos importantes, que entrañan graves consecuencias para el bienestar de todos los pueblos.
El lenguaje incluyente adquiere especial relevancia, sobre todo, en el contexto de grandes avances en materia de derechos humanos de las mujeres y, en especial, de tareas pendientes como la erradicación de la violencia y la discriminación en razón de género.
La legisladora se basa en la Organización de las Naciones Unidas para la Igualdad de Género y el Empoderamiento de la Mujer, también conocida como ONU Mujeres, reconoce a este lenguaje incluyente como lenguaje con sensibilidad de género, cuya adopción es:
Es una forma influyente de promover la igualdad de género y luchar contra el sesgo basado en el género, cuenta habida del papel fundamental que desempeña el lenguaje en dar forma a las actitudes culturales y sociales. El lenguaje con sensibilidad de género se refiere al lenguaje que evita el empleo de un sesgo de sexo o género social y que por lo tanto es menos probable que conlleve estereotipos de género.
El masculino se ha generalizado para referirse a mujeres y hombres ha sido la norma prescrita por la tradición académica y las instituciones que reglamentan la gramática del idioma castellano como elemento fundamental de la comunicación, sin embargo las transformaciones sociopolíticas y culturales de los últimos años reclaman el uso del femenino sobre una base de igualdad con el masculino, como un reflejo mismo de la lucha por alcanzar la igualdad de género en todos los aspectos de la sociedad.
La diputada en abonar al avance de la agenda de igualdad y derechos humanos en el estado mediante la incorporación del lenguaje incluyente en el texto constitucional, propone “utilizar lenguaje incluyente y no sexista no va a eliminar inmediatamente la desigualdad entre mujeres y hombres, es una importante y efectiva herramienta para que las mujeres y los grupos de población históricamente excluidos sean visibles y nombrados correctamente”.