“Que todo el mundo presione en sus gobiernos, ayuntamientos, en las compañías en las que trabaja, en las comunidades y sociedades para decir que rescatar los océanos es absolutamente esencial”, explicó Guterres en la conferencia que reúne a delegaciones alrededor de 150 países en la capital lusa.
En opinión del secretario general de la ONU “necesitamos despertar a la gente, presionar a los que toman decisiones para asegurarnos de que somos capaces de rescatar a los océanos”, expresó. “Nos encontramos ante una emergencia de los océanos. Hay que cambiar la marea”, añadió Guterres en la apertura de la II Conferencia de los Océanos, en la que exhortó a los actores públicos y privados a sumar esfuerzos y financiación con el objetivo de frenar la degradación de los mares.
Por su parte, los anfitriones de la reunión, tanto Portugal como Kenia, enfatizaron pasar a la “acción” sin “excusas”.
“La guerra y la pandemia no pueden ser excusa para ignorar los problemas estructurales”, explicó Marcelo Rebelo de Sousa, presidente luso.
En tanto, Colombia arribó a la conferencia con el objetivo de lograr en los próximos días que el 30 % de sus áreas marinas estén protegidas, con lo que se adelanta a la meta prevista para el 2030 y se convierte en en el primer país del hemisferio occidental en lograrlo.
“No vamos a esperar al año 2030”, aseveró el presidente Iván Duque, y así mismo explicó que con esta medida se posibilitará sumar 16 millones de hectáreas de áreas protegidas marinas , siendo el doble de las actuales.
Por otra parte, el Banco de Desarrollo de América Latina-CAF dio a conocer que va a destinar 1,250 millones de dólares para a financiar proyectos para preservar los ecosistemas marinos y costeros de América Latina y el Caribe durante los próximos cinco años.
Esta es una “primera apuesta en grande” centrada en los océanos, explicó Sergio Díaz-Granados, presidente de CAF, así mismo aseguró que “no tiene antecedentes” en los 54 años de historia del banco.
Con los deberes “en agenda” ha llegado uno de los anfitriones de la reunión, Portugal, que se compromete a proteger el 30 % de sus áreas marinas para 2030, según adelantó el primer ministro, António Costa, que anunció además la creación de una zona piloto de emisiones controladas en el mar.
Si bien, los océanos son el tema central e esta reunión en Portugal, la sombra de la guerra de Rusia contra Ucrania ensombrece sobre la conferencia.
En este sentido, João Lourenço el presidente de Angola, en su intervención ante el pleno pidió el “cese del fuego incondicional” debido a que “el mundo no soporta un conflicto en el corazón de Europa”.
En tanto que, Angola fue uno de los países que decidió abstenerse en la votación de condena contra Rusia por la invasión de Ucrania en la Asamblea de Naciones Unidas y actualmente mantiene una estrecha relación histórica con Moscú.
Por otra parte, también asiste a esta conferencia en Lisboa el enviado ruso Ruslan Edelgeriyev mismo advirtió que las sanciones occidentales contra su país pueden “complicar” el cumplimiento de los objetivos de neutralidad carbónica a corto plazo.
“La descarbonización de la economía rusa prosigue sin parar. Pretendemos alcanzar la neutralidad carbónica hasta 2060”, dijo Edelgeriyev.
Tomado de Vanguardia
Con información de la Agencia EFE.