
EFE.- Militares de Venezuela destruyeron, durante un operativo en el estado Apure (oeste, fronterizo con Colombia), una aeronave sin los permisos correspondientes para estar dentro del país ni plan de vuelo, informó este lunes el comandante estratégico operacional de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), Domingo Hernández Lárez.
Tras una operación de vigilancia, la aeronave bimotor fue localizada en tierra, oculta y "enmascarada" junto a un terraplén utilizado como "pista clandestina improvisada", explicó en Instagram
El avión no "presentaba seriales visibles y de acuerdo al registro de control de información de la región no presentaba permiso ni plan de vuelo nacional, por lo que fue declara hostil, siendo la misma destruida in situ", escribió en sus redes.
Según la FANB, ya son 31 las aeronaves inmovilizadas en lo que va de 2025, y 422 desde la promulgación de la ley de defensa del espacio aéreo, en 2012.
El pasado 5 de diciembre, la FANB interceptó e inmovilizó una aeronave en Apure declarada hostil por las autoridades, según informó Hernández Lárez.
El jefe militar explicó entonces que el avión entró al país por el este sin emitir código de identificación ni presentar plan de vuelo y con el transpondedor apagado, por lo que "se declaró su ilegalidad y se ordenó de inmediato su interdicción con tres sistemas caza F-16" de la fuerza aérea.
Estas operaciones se han llevado a cabo en momentos en el que Estados Unidos mantiene un despliegue aeronaval en el Caribe, cerca a aguas venezolanas, que, afirma, tiene como objetivo combatir el narcotráfico en la región, pero que Caracas interpreta como "amenaza" y un intento de propiciar un cambio de régimen.
Las tensiones escalaron tras el anuncio por parte del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de un bloqueo de los petroleros sancionados que se trasladen desde y hacia el país sudamericano, y la confiscación de dos buques que transportaban crudo venezolano en los últimos días.
Con información de Latinus.

La Secretaría de Marina, que alguna vez fue una de las instituciones con mayor prestigio en el país, hoy termina el año bajo tragedia y el escrutinio público, luego del descarrilamiento del tren interoceánico.
No es "una rachita", sino que han sido varias las consecuencias de la política de improvisación y sobrecarga de funciones que ha desvirtuado la naturaleza de la dependencia.
Hay que recordar el choque del Buque Escuela Cuauhtémoc contra el puente de Brooklyn, que cobró la vida de un cadete y un marinero, o el desplome de un avión de la Armada en Galveston, Texas, durante una misión humanitaria, con un saldo de seis fallecidos.
A esto se le suma el escándalo del "huachicol fiscal" que involucra directamente a los sobrinos políticos del almirante José Rafael Ojeda Durán.
El descarrilamiento del Tren Interoceánico, que dejó 13 muertos y casi un centenar de heridos.
En esta improvisación resuena la ocurrencia de poner a los expertos en barcos la operación de trenes.
Tras esta tragedia se encuentran los señalamientos de materiales defectuosos por parte del Grupo Ferrocarrilero del Sureste y el reciclaje de dos trenes obsoletos de Puebla no fueron accidentes, sino negligencias.
Incluyendo la mezcla de balasto de mala calidad y la participación de Gonzalo López Beltrán, hijo del expresidente, como "supervisor" de las tareas junto a la Marina, confesa por el propio AMLO.
Con familias en luto, la Marina solo queda en ridículo, sometida a intereses personales y de negocios del gobierno de la 4T.

El embajador de Estados Unidos en México, Ronald Johnson, expresó sus “más sinceras condolencias” a las familias de las víctimas del descarrilamiento del tren Interoceánico en Oaxaca.
A través de su cuenta en X, Ronald Johnson comentó "Expresamos nuestras más sinceras condolencias a las familias y seres queridos de quienes perdieron la vida en el reciente accidente ferroviario en Oaxaca. Nuestros pensamientos y oraciones también están con las personas lesionadas y con todos los afectados".

La Secretaría de Marina, que alguna vez fue una de las instituciones con mayor prestigio en el país, hoy termina el año bajo tragedia y el escrutinio público, luego del descarrilamiento del tren interoceánico.
No es "una rachita", sino que han sido varias las consecuencias de la política de improvisación y sobrecarga de funciones que ha desvirtuado la naturaleza de la dependencia.
Hay que recordar el choque del Buque Escuela Cuauhtémoc contra el puente de Brooklyn, que cobró la vida de un cadete y un marinero, o el desplome de un avión de la Armada en Galveston, Texas, durante una misión humanitaria, con un saldo de seis fallecidos.
A esto se le suma el escándalo del "huachicol fiscal" que involucra directamente a los sobrinos políticos del almirante José Rafael Ojeda Durán.
El descarrilamiento del Tren Interoceánico, que dejó 13 muertos y casi un centenar de heridos.
En esta improvisación resuena la ocurrencia de poner a los expertos en barcos la operación de trenes.
Tras esta tragedia se encuentran los señalamientos de materiales defectuosos por parte del Grupo Ferrocarrilero del Sureste y el reciclaje de dos trenes obsoletos de Puebla no fueron accidentes, sino negligencias.
Incluyendo la mezcla de balasto de mala calidad y la participación de Gonzalo López Beltrán, hijo del expresidente, como "supervisor" de las tareas junto a la Marina, confesa por el propio AMLO.
Con familias en luto, la Marina solo queda en ridículo, sometida a intereses personales y de negocios del gobierno de la 4T.

El embajador de Estados Unidos en México, Ronald Johnson, expresó sus “más sinceras condolencias” a las familias de las víctimas del descarrilamiento del tren Interoceánico en Oaxaca.
A través de su cuenta en X, Ronald Johnson comentó "Expresamos nuestras más sinceras condolencias a las familias y seres queridos de quienes perdieron la vida en el reciente accidente ferroviario en Oaxaca. Nuestros pensamientos y oraciones también están con las personas lesionadas y con todos los afectados".
