Brujería, rituales y magia negra; ‘pasiones secretas’ de Elba Esther resurgen tras confesiones de ‘El Compayito’

“Esta señora tenía unas cargas emocionales muy fuertes”, indicó Edson Zúñiga sobre la ex líder sindical del SNTE, Elba Esther Gordillo, en una entrevista con Yordi Rosado, apuntando que “La Maestra” se le había insinuado.

Ante las revelaciones, volvieron a resurgir rumores, chismes y leyendas sobre Elba Esther, recordando que no es la primera vez que alguien narra historias “perturbadoras” sobre ella.

Es bien sabido que a la sindical le han perseguido historias de rituales y brujería, los cuales realizaba con intenciones de obtener un beneficio personal.

José Gil Olmos, periodista de Proceso, documentó diversos encuentros de Elba Esther con el mundo del esoterismo, principalmente, en su libro “Los brujos del poder”, donde narra el conocido viaje a Nigeria que hizo para “protegerse” de Ernesto Zedillo, el entonces presidente de México.

Según datos y testigos recabados por Gil Olmos, “La Maestra” tenía una relación tediosa con Zedillo, que buscaba “librarse” de ella en cuanto antes, incluso, había “determinado quitarle el poder e investigarla”.

“Cuando la maestra supo que el gobierno de Zedillo indagaba en sus cuentas y en las de sus socios principales, también comprendió que estaba en peligro su poder y su libertad”, redacta Gil Olmos.

“De manera urgente y absolutamente fuera de sí, como mandan sus costumbres, citó a los miembros de su equipo más cercano y se los llevó fuera del país, como ha reconocido uno de sus ex colaboradores”.

El periodista redacta que el ritual al que asistió Elba Esther duró cuatro horas y, además, sacrificaron a un león, desollándole la piel para envolver a la sindical, con la promesa de que “le daría fuerza”.

Según sus testigos, Elba Esther ha estado interesada en la brujería y el esoterismo desde joven, describiendo incluso que era una de sus mayores pasiones.

“Durante varios años la maestra practicó la santería; sin embargo, tuvo que dejarla porque llegó a un nivel que la obligaba a portar ciertos collares, vestirse de blanco, raparse y ponerse un turbante. Si no lo hacía, comenzarían a fallar los trabajos, pues no estaría actuando de manera comprometida”, agrega.

Por ello, el popular viaje a Nigeria surgió después de que Elba Esther visitó a un “lector de caracoles”, quien reveló dicha premisa, y le costó 45 mil dólares, además, la vida de un ser querido, sugirió “el brujo” con quien realizó el ritual en Nigeria.

Días después, su nieto preferido, Francisco, se desnucó en el elevador del departamento donde vivía, perdiendo la vida.

Asimismo, otro de sus gustos culposos era “cerrar tiendas para ella sola”, pues el entonces titular de la Procuraduría General de la República, Jesús Murillo Karam, relató que las autoridades detectaron que, entre 2009 y 2012, pagos millonarios a la tienda Neuman Marcus, por alrededor de 3 millones de dólares, aparentemente desviados de recursos del sindicato magisterial.

Además, una exvendedora de la tienda confirmó su lujosa vida, pues compraba zapatos y prendas de marcas reconocidas, hasta joyas de alto valor.

Por otro lado, aunque con una vida llena de reliquias y beneficios, su médico Jesús Calliser reconoció que Elba Esther tenía 10 padecimientos: hepatitis viral tipo C, insuficiencia renal, hipertensión arterial, dos anerurismas en arterias cerebrales, sacos aracnoideos de fluido, una atrofia en los músculos del abdomen, una atrofia en el músculo oblicuo, diverticulosos, descalcificación en la cadera y una lesión en el tobillo derecho, reportó Noticias MVS.

Tomado de Vanguardia

Con información de Aristegui Noticias y Proceso.