El gobierno español viene promoviendo una normativa desde el año 2019 para proteger a quienes realicen denuncias sobre irregularidades dentro de las empresas donde trabajan.
Esto no es más que el traslado de la Directiva Whistleblowing al marco legal español. Esa directiva es una ley aprobada por el parlamento europeo para impulsar a los trabajadores a reportar actos de corrupción, malos manejos y otras prácticas que puedan dejar mucho que desear a nivel ético y moral dentro de las organizaciones.
Algunas de las novedades que esta ley contempla es la implementación de un canal de denuncias dentro de las empresas. Este tiene como finalidad ofrecer a sus trabajadores el medio para comunicar de manera 100% confidencial cualquier acto que contravenga el código de conducta, irregularidad o cualquier actividad que suponga un delito.
La aplicación de esta normativa involucra de manera directa a RRHH. Esto se debe a que es el área encargada, dentro de una organización en conjunto con el departamento de consultoría jurídica o legal, de la implementación de dicha normativa. Por lo tanto, son quienes deben implantar el canal de comunicación para que las denuncias puedan llevarse a cabo.
La ley no establece un canal de comunicación específico, por lo que las empresas pueden seleccionar el de su preferencia. Este puede ser el correo electrónico, una línea telefónica, un reporte oral u otros. No obstante, algunas organizaciones han optado por soluciones dadas por softwares integrales como Sesame HR, en el que se ofrecen herramientas para la digitalización de los procesos de Recursos Humanos.
Con la implementación de un canal de comunicación, el área de Recursos Humanos cuenta con un poderoso instrumento para hacerles saber a sus trabajadores que los valores morales, éticos y humanos son los que sostienen los procesos y las metodologías de trabajo de la empresa.
El canal de denuncias tiene como objetivo principal que las organizaciones se desarrollen basándose en ciertas premisas éticas, donde los trabajadores tengan la garantía de que la organización cumple con principios y valores. Esto le da una imagen transparente a la empresa y afianza una cultura de responsabilidad.
Según la normativa, el canal de denuncias debe ser implementado de manera obligatoria por aquellas organizaciones empresariales privadas que cuenten con una nómina superior a los 50 trabajadores. La normativa también aplica a instituciones del estado que tengan a cargo una densidad de población por encima de los 10 mil habitantes.
Aunque la normativa de la directiva europea para realizar las denuncias no establece un medio de comunicación en particular, sí exige, entre otras cosas, que el denunciante tenga la posibilidad de elegir el anonimato. Por lo tanto, la empresa debe asegurarse de que el medio utilizado cumpla con dicha exigencia.
Por esa razón, lo ideal es implantar un software capaz de gestionar este proceso de manera confidencial y que brinde la seguridad requerida al trabajador. Esto es con la intención de que el denunciante no se sienta intimidado.
Algunos han incluido el canal de denuncias dentro de su sitio web, utilizando un enlace. Al acceder, el trabajador debe aceptar los términos asociados a la seguridad y protección de datos, para posteriormente llenar el formulario respectivo.
Después de esto, un gestor independiente podrá comunicarse con el denunciante, ya sea para obtener más datos que le permitan corroborar la denuncia o para iniciar o ampliar la investigación.