wkjZdAuEste lunes 6 de enero comenzó a correr fuertemente el rumor de que Zendaya y Tom Holland se comprometieron tras descubrir que durante la asistencia de ella a los Golden Globes 2025, además de su hermoso outfit, la actriz llevaba un anillo que usó en el dedo anular de su mano izquierda, ya que presenta un diamante de gran tamaño en solitario y no es era de la firma de joyería de la que es embajadora.wkjZdAu Omnia.com.mx
wkjZdAuEl rumor de compromiso aumentó después de que la cuenta de chismes de Instagram, Deux Moi compartiera una captura de pantalla de un correo anónimo que recibieron y que afirma que el anillo de Zendaya es de compromiso. Todo parece indicar que la pieza es de Jessica McCormack, una joyera con sede en Londres, valuado en más de $200,000 dólares y que pertenece a una línea de anillos de compromiso. wkjZdAu Omnia.com.mx
wkjZdAuHasta el momento, ninguno de los dos actores se ha pronunciado al respecto, pero el revuelo en redes sociales ha causado furor.wkjZdAu Omnia.com.mx
wkjZdAuCon información de la-guardia.com.mxwkjZdAu Omnia.com.mx
El intento de desaparecer los Órganos Públicos Locales Electorales, incluidos los tribunales electorales estatales, y centralizar la organización de todos los comicios en el INE y los temas jurídicos a los tribunales federales, no es un tema que deba abordarse con ocurrencia, sino con mucho cálculo político y principalmente económico.
El INE, se sustenta con recursos del presupuesto nacional y los OPLEs, como el Instituto Estatal Electoral de Chihuahua, dependen de los presupuestos públicos locales para operar.
En 2021, el IEE de Chihuahua manejó un presupuesto de 457 millones 629 mil pesos para organizar las elecciones de ese año, incluyendo innovaciones como el voto chihuahuense en el extranjero y la implementación del PREP-Casilla. Para la elección judicial 2025, se autorizó una ampliación presupuestal para el IEE de 328 millones de pesos.
Si los OPLEs desaparecen, por qué los estados, que ahora financian sus propios procesos, tendrían que aportar recursos al INE, es muy absurdo pensar que los gobiernos locales aceptarían sin chistar la cantidad solicitada por una autoridad nacional, sin voz ni voto en la administración de esos fondos.
La centralización, aunque pueda prometer una aparente simplificación, corre el riesgo de despojar a los estados de una parte fundamental de su autonomía, y responsabilidad democrática.
El intento de desaparecer los Órganos Públicos Locales Electorales, incluidos los tribunales electorales estatales, y centralizar la organización de todos los comicios en el INE y los temas jurídicos a los tribunales federales, no es un tema que deba abordarse con ocurrencia, sino con mucho cálculo político y principalmente económico.
El INE, se sustenta con recursos del presupuesto nacional y los OPLEs, como el Instituto Estatal Electoral de Chihuahua, dependen de los presupuestos públicos locales para operar.
En 2021, el IEE de Chihuahua manejó un presupuesto de 457 millones 629 mil pesos para organizar las elecciones de ese año, incluyendo innovaciones como el voto chihuahuense en el extranjero y la implementación del PREP-Casilla. Para la elección judicial 2025, se autorizó una ampliación presupuestal para el IEE de 328 millones de pesos.
Si los OPLEs desaparecen, por qué los estados, que ahora financian sus propios procesos, tendrían que aportar recursos al INE, es muy absurdo pensar que los gobiernos locales aceptarían sin chistar la cantidad solicitada por una autoridad nacional, sin voz ni voto en la administración de esos fondos.
La centralización, aunque pueda prometer una aparente simplificación, corre el riesgo de despojar a los estados de una parte fundamental de su autonomía, y responsabilidad democrática.