
Y mientras el pasado 30 de junio se daba a conocer, la próxima reapertura escalonada de la frontera norteamericana a los becerros mexicanos; autoridades de Nicaragua daban a conocer que el día 29 de junio se reanudaba exportación de 4 mil 655 cabezas de ganado ese país a México, por vía marítima.
Se informó que, el Instituto de Protección y Sanidad Agropecuaria de Nicaragua, garantizó las medidas sanitarias de exportación a México, al reanudarse intercambio comercial en este rubro.
Esas cabezas de ganado vienen a someterse el proceso de engorda en nuestro país, tras su importación. En información que circuló por parte del gobierno de ese país, se dijo que, personal de ese Instituto, así como del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria ( Senasica), por parte de nuestro país, supervisaron la medidas de sanidad.
Así mientras en Chihuahua, aún no se da salida, vía exportación a los becerros, de los cuales existe un rezago desde el año 2024, porque la frontera norteamericana aún está cerrada, ya se autorizó la importación de ganado de Centroamérica, para engorda en nuestro país.
El detalle se ha dicho a nivel nacional, es que solo el 1% del ganado que ingresa a México, lo hace de manera formal el resto es por contrabando. Lo que representa riesgos como fue el que se materializó con el gusano barrenador. Por más que los productores de Chihuahua han solicitado el cierre de la frontera Sur con Guatemala, al ganado de Centroamérica, este no se ha dado y el contrabando dicen sigue fluyendo, según se comenta.
Foto: Captura de pantalla de video del IPSA Nicaragua