
AP.- El cargo de obstrucción grave contra el líder de un sindicato en el sur de California que fue arrestado mientras protestaba contra una redada de migración a principios de este año será reducido a un delito menor, según registros judiciales.
David Huerta había sido acusado de obstrucción, resistencia u oposición a un agente federal, un delito grave de clase A, según un documento presentado el viernes por el fiscal federal interino Bill Essayli en un tribunal federal.
Sin embargo, los fiscales presentaron este sábado una propuesta de orden con la que buscaban la desestimación sin perjuicio del cargo original de conspiración para obstaculizar a un agente.
El Departamento de Justicia confirmó el sábado en un correo electrónico a The Associated Press que solicitó desestimar la denuncia por delito grave contra Huerta.
Huerta es presidente del Sindicato Internacional de Empleados de Servicios de California. Fue arrestado el 6 de junio mientras protestaba frente a un negocio en Los Ángeles donde agentes federales investigaban presuntas violaciones a las leyes de migración.
Una multitud de personas se reúne afuera gritando contra los agentes. Huerta se sentó frente a una puerta vehicular y animó a otros a caminar en círculos para intentar evitar que las fuerzas del orden entraran o salieran, escribió en un documento judicial federal anterior un agente especial de Investigaciones de Seguridad Nacional, que forma parte del Servicio de Migración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés).
Un agente le dijo a Huerta que se fuera, luego lo sujetó para retirarlo del camino de un vehículo, escribió el agente. Huerta se resistió, y el agente lo empujó al suelo y lo arrestó, según el documento.
Huerta fue liberada posteriormente de la custodia federal con una fianza de 50 mil dólares.
El sindicato de Huerta representa cientos de millas de conserjes, agentes de seguridad y otros trabajadores en todo California.
Su arresto se convirtió en un grito de protesta para los defensores de los inmigrantes de todo el país, quienes pidieron su liberación y el fin de las medidas migratorias del presidente Donald Trump.
Abbe David Lowell y Marilyn Bednarski, los abogados de Huerta, dijeron en un comunicado que buscarán “el juicio más rápido” para reivindicarlo.
“En los cuatro meses que han pasado desde el arresto de David, se ha vuelto aún más claro que no había motivos para acusarlo y, ciertamente, ninguno para la forma en que fue tratado”, escribieron.
"Este caso no es una búsqueda de justicia de buena fe, sino un acto descarado de represalia, diseñado para silenciar la disidencia y castigar la oposición. Refleja la continua conversión en arma del poder procesal por parte del gobierno de Trump contra quienes perciben como sus oponentes", finalizaron.
Con información de: LatinUs.