
Las sospechas sobre presuntos vínculos familiares entre el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla y líderes criminales han reactivado el debate sobre la cercanía entre poder político y crimen organizado en Michoacán. Aunque el mandatario ha negado toda relación, documentos filtrados y grabaciones apuntan a una red familiar con participación activa en Cárteles Unidos
A unos meses de que Alfredo Ramírez Bedolla iniciara su carrera hacia la gubernatura de Michoacán en 2021, surgieron señalamientos que lo vinculaban indirectamente con figuras del crimen organizado por la vía familiar. El principal de ellos fue Adalberto Fructuoso Comparán Rodríguez, conocido como ‘El Fruto’, identificado por la DEA como un líder criminal de alto perfil y cabecilla de Cárteles Unidos, grupo delictivo que ha enfrentado al Cártel Jalisco Nueva Generación por el control de la entidad.
Según reveló el portal Emeequis, Comparán Rodríguez es tío materno del hoy gobernador, y su hijo, Adalberto Comparán Bedolla, primo hermano del mandatario morenista. Ambos fueron detenidos en 2021 como parte de una operación de la DEA que logró incautar el mayor cargamento de metanfetamina en la historia de Miami, introducido desde México vía Texas. La droga, más de 500 kilos, fue ocultada dentro de baldosas y galones de pintura.
Durante su campaña electoral, Ramírez Bedolla rechazó cualquier vínculo con su tío y su primo, argumentando que hacía más de 15 años no tenía contacto con ellos. Atribuyó la difusión del caso a una estrategia electoral en su contra. “Hace más de 10 años dejaron de tener relación de pareja. Un servidor no ha tenido contacto desde hace 15, 20 años, con esta persona”, declaró entonces.
No obstante, documentos filtrados por el grupo Guacamaya Leaks, y citados también por Emeequis, revelan que Anabel Bedolla Marín –madre del primo detenido e identificada como excuñada de Fructuoso– habría fungido como negociadora del grupo criminal Cárteles Unidos. En grabaciones telefónicas intervenidas en 2022 por autoridades federales, se registró una reunión entre Anabel y miembros de la organización criminal en instalaciones controladas por Los Viagras en Apatzingán.
Estos antecedentes se suman a acusaciones públicas que en vida realizó Carlos Manzo, el alcalde independiente de Uruapan asesinado el 2 de noviembre pasado. Manzo denunció abiertamente al gobernador Ramírez Bedolla por presuntos vínculos delictivos y corrupción dentro del gobierno estatal. “La peor organización criminal que está operando en Michoacán se llama Guardia Civil y gobierno del estado”, acusó en 2023.
El entorno político y delictivo que rodea a Ramírez Bedolla se remonta a la época en que fue subsecretario en el gobierno de Leonel Godoy Rangel, cuando su tío ‘El Fruto’ fungía como alcalde de Aguililla, también postulado por el PRD.
Comparán Rodríguez fue detenido en 2009 durante el operativo conocido como “el michoacanazo”, aunque posteriormente recuperó la libertad y su cargo al frente del ayuntamiento. Más tarde se le acusó de extorsionar a ediles en nombre de Los Templarios y de encabezar una falsa autodefensa para desviar la atención de su historial criminal.
La DEA ubicó a Comparán como uno de los líderes fundadores de Cárteles Unidos, organización que agrupa a facciones como Los Viagras, La Nueva Familia Michoacana, Los Blancos de Troya y otros remanentes del crimen organizado local. Fue detenido en marzo de 2021 en Guatemala, mientras que su hijo y otros cómplices cayeron en Miami. Posteriormente, fue condenado a 15 años de prisión.
A pesar del escándalo, las autoridades estadounidenses no involucraron directamente a Alfredo Ramírez Bedolla en actividades delictivas, pero los documentos filtrados y las grabaciones sí muestran una red familiar extendida que mantuvo contacto y participación activa en el crimen organizado, incluso después de las detenciones.
Este no ha sido un caso aislado en la política michoacana. El propio exgobernador Leonel Godoy Rangel enfrentó en su momento un escándalo familiar cuando su medio hermano, Julio César Godoy Toscano, fue acusado de pertenecer a Los Templarios. Aunque logró eludir la acción de la justicia al asumir como diputado federal, en 2020 fue finalmente exonerado por una jueza. Godoy Rangel afirmó entonces: “Soy hijo único. Tengo 18 medios hermanos. Todos viven honestamente”. La sombra de las relaciones familiares con el narcotráfico vuelve a posarse sobre un gobernador michoacano, en un contexto de violencia persistente, estructuras criminales profundamente arraigadas y una sociedad cada vez más crítica frente a la complicidad –real o percibida– entre el poder político y el crimen organizado. Redacción Más