
En días pasados comenzó a circular un video en redes sociales en donde se puede observar maquinaria derribando “La casa embrujada de las Lomas”, lo que rápidamente provocó reacciones por parte de Chihuahuenses, por ser un emblema cultural en la capital.
La página oficial de Chihuahua Bárbaro compartió un texto en el que menciona que dicha construcción marcó a varias generaciones por las historias que corrían sobre los antiguos dueños y el incendio que la consumió, recordando también que la empresa de turismo realizó algunas presentaciones en el lugar.
“La demolición de la famosa Casa Embrujada de Lomas marca el final de un capítulo que, por generaciones, alimentó la imaginación, la curiosidad y hasta el temor de miles de chihuahuenses. Aquella finca —envuelta en leyendas, siendo la más conocida la de “la niña quemada”, probablemente inspirada por los incendios que devastaron la propiedad hace décadas— se convirtió con el tiempo en un símbolo urbano, un mito vivo que todos conocíamos aunque nunca hubiéramos cruzado su barda.
Durante años, incontables personas se acercaron atraídas por el misterio: algunos se conformaban con mirar desde afuera, otros, más intrépidos, se aventuraban a brincar la barda para recorrer sus más de 3,600 metros cuadrados en silencio expectante. La casa parecía observarlos a todos, guardando celosamente sus secretos.
Tuve la oportunidad, gracias al acuerdo con las propietarias, de convertirla en escenario de dos de nuestros paseos de leyendas: el Paseo de Sherlock Holmes y Nocturna, nuestro tour más reciente. Ahí vivimos noches intensas, llenas de historias, de sombras, de ruidos inexplicables y de esa sensación única que solo un lugar cargado de memoria puede provocar. Podría contar muchas anécdotas —y quizá algún día lo haga—, pero hoy prefiero guardar silencio ante lo que siento.
Porque, mientras observo cómo la casona desaparece bajo el golpe de las máquinas, me invade una profunda nostalgia. No solo por lo que representaba para la ciudad, sino porque, como suele decirse, los seres humanos estamos hechos de historias… y en esta casa ocurrieron muchas.
Hoy se va un edificio, pero permanece el eco de todas esas narraciones que, generación tras generación, hicieron de la Casa Embrujada de Lomas un punto fijo en nuestra imaginación colectiva. Y quizá, en el fondo, esa sea la verdadera manera en que un lugar permanece vivo.”, publicaron en sus redes sociales.