jXo8JVNCon las políticas extranjeras e internas en México, se ha visto afectado el empleo en Chihuahua, por lo que el Director de Desarrollo Económico del Municipio, José Jordán, adelantó que se espera un periodo de reacomodo en la industria que podría durar hasta 4 meses. jXo8JVN Omnia.com.mx
jXo8JVNY es que en días pasados la Plataforma de Inteligencia Competitiva del Sector Privado (PIC) dio a conocer en un estudio que la ciudad de Chihuahua perdió 994 empleos formales en el mes de abril, un total de 664 hombres y 350 mujeres, se despidieron del formalismo el mes pasado, con esto Jordán dijo que por la estas políticas podría dar pie a la baja la producción y se requieren menos empleos.jXo8JVN Omnia.com.mx
jXo8JVNSe espera que en los próximos tres o cuatro meses termine esta curva pero Jordán no descartó que el país vecino imponga más tarifas y vuelva a afectar la industria, a pesar de esto, la industria local tiene una oportunidad interesante para procesos en Chihuahua, como el aeroespacial y automotriz y expuso que siguen interesándose inversionistas en Chihuahua. jXo8JVN Omnia.com.mx
El intento de desaparecer los Órganos Públicos Locales Electorales, incluidos los tribunales electorales estatales, y centralizar la organización de todos los comicios en el INE y los temas jurídicos a los tribunales federales, no es un tema que deba abordarse con ocurrencia, sino con mucho cálculo político y principalmente económico.
El INE, se sustenta con recursos del presupuesto nacional y los OPLEs, como el Instituto Estatal Electoral de Chihuahua, dependen de los presupuestos públicos locales para operar.
En 2021, el IEE de Chihuahua manejó un presupuesto de 457 millones 629 mil pesos para organizar las elecciones de ese año, incluyendo innovaciones como el voto chihuahuense en el extranjero y la implementación del PREP-Casilla. Para la elección judicial 2025, se autorizó una ampliación presupuestal para el IEE de 328 millones de pesos.
Si los OPLEs desaparecen, por qué los estados, que ahora financian sus propios procesos, tendrían que aportar recursos al INE, es muy absurdo pensar que los gobiernos locales aceptarían sin chistar la cantidad solicitada por una autoridad nacional, sin voz ni voto en la administración de esos fondos.
La centralización, aunque pueda prometer una aparente simplificación, corre el riesgo de despojar a los estados de una parte fundamental de su autonomía, y responsabilidad democrática.
El intento de desaparecer los Órganos Públicos Locales Electorales, incluidos los tribunales electorales estatales, y centralizar la organización de todos los comicios en el INE y los temas jurídicos a los tribunales federales, no es un tema que deba abordarse con ocurrencia, sino con mucho cálculo político y principalmente económico.
El INE, se sustenta con recursos del presupuesto nacional y los OPLEs, como el Instituto Estatal Electoral de Chihuahua, dependen de los presupuestos públicos locales para operar.
En 2021, el IEE de Chihuahua manejó un presupuesto de 457 millones 629 mil pesos para organizar las elecciones de ese año, incluyendo innovaciones como el voto chihuahuense en el extranjero y la implementación del PREP-Casilla. Para la elección judicial 2025, se autorizó una ampliación presupuestal para el IEE de 328 millones de pesos.
Si los OPLEs desaparecen, por qué los estados, que ahora financian sus propios procesos, tendrían que aportar recursos al INE, es muy absurdo pensar que los gobiernos locales aceptarían sin chistar la cantidad solicitada por una autoridad nacional, sin voz ni voto en la administración de esos fondos.
La centralización, aunque pueda prometer una aparente simplificación, corre el riesgo de despojar a los estados de una parte fundamental de su autonomía, y responsabilidad democrática.