
La Coordinadora del Programa SaludCasaPorCasa en Chihuahua de la Delegación del Bienestar en Chihuahua, Amanda Rocha, como suplente de Rosana Díaz en la diputación del distrito 4, se deslindó de lo que llamó "traición" a la ausencia de la diputada propietaria en la sesión donde derivado de ello se obtuvo la mayoría calificada, "La dignidad no se ausenta".
Publicó en redes sociales:
Ayer, con indignación y profunda tristeza, me enteré de que la diputada Rosana Díaz , de quien soy suplente, se ausentó de sus labores legislativas para atender una “situación personal en su casa” durante una de las sesiones más importantes para el Congreso del Estado de Chihuahua.
Ayer se presentó, discutió y aprobó el Presupuesto de Egresos para el estado de Chihuahua en 2026, tras más de 11 horas de debate, en las que se discutieron y propusieron mejoras a la distribución del recurso económico.
Para autorizar a la gobernadora a solicitar un crédito de 3,000 millones de pesos, reestructurar la deuda de más de 15,700 millones de pesos y el refinanciamiento de otros 665 millones de pesos, se necesitaban dos terceras partes del total de votos de las diputadas y los diputados presentes; esto se conoce como mayoría calificada.
En el Congreso hay 33 diputadas y diputados, de los cuales 12 son de Morena, de tal forma que, aunque se perdiera la votación por mayoría simple, los prianistas y sus eternos aliados no alcanzaban la mayoría calificada.
Lo lamentable fue que tres diputadas (dos de Morena y una del PT) se ausentaron precisamente en el momento de la votación, lo cual permitió a los prianistas lograr la mayoría calificada sin mayor problema. Las ausentes fueron:
Rosana Díaz Reyes – Diputada del Distrito 4 (Juárez)
Irlanda Dominique Márquez Nolasco – Diputada del Distrito 6 (Juárez)
Edith Palma Ontiveros – Diputada plurinominal (Guachochi)
Como suplente de Rosana Díaz Reyes, rechazo enérgicamente la ausencia y la omisión en un momento tan importante.
Diputada, fuimos elegidas bajo tres principios: no mentir, no robar y no traicionar. Ayer, al abandonar el recinto, se traicionó la confianza de los miles de juarenses del Distrito 4 que votaron para ser defendidos, no para ser endeudados.
La historia legislativa de Chihuahua recordará esta votación no por quienes levantaron la mano, sino por quienes decidieron esconderla.
La dignidad no se ausenta. La lealtad no se va a casa temprano. Como tu suplente y como militante, me deslindo de tu actuar y exijo que se hable con la verdad: ayer no ganó la mayoría, ayer ganó la ausencia.