"Los hombres son cerdos que se alimentan de dinero", esa frase según historiadores se le atribuye a Napoleón Bonaparte y paradójicamente ese fue su final, harto de dinero y poder y terminó en una pocilga y sin libertad. Algo así es lo que como sociedad estamos padeciendo, de la noche a la mañana transitamos de un por demás trillado neoliberalismo a una izquierda. Si se le puede definir como izquierda.
De las acciones “democráticas” en la que como ciudadanos fuimos testigos a una “democratización” izquierdista que fracasó en las urnas en esta mal llamada reforma judicial, en la cual el “pueblo” mandó y generó un cambio y con cifras que demuestran la debilidad de un proyecto, sobrevivirá y actuará pese a lo que los opositores digan señalen.
El pequeño detalle en esta transición ideológica es que la población, la masa humana de este país, simplemente no sabe qué demonios es el Neoliberalismo y mucho menos tiene la más mínima noción con que se come la izquierda. Y el problema es tan, pero tan complejo que ni los propios abanderados de la 4T acaban de comprender su supuesta ideología, mucho menos sus valores y él como actuar y convivir.
Recuerdo mucho una vez una charla entre secretarios de estado en Venezuela que los veía llegar a todos en Mercedes Benz, Land Rover y BMW todos modelos del año se aproximaban al Palacio de Miraflores donde el Comandante Chávez despachaba y con cierto sarcasmo cuestioné el hecho de los autos de alta gama y la respuesta del Ministro de Comunicación fue tajante: “en que parte está escrito que debemos andar en bus o vernos jodidos” y tuve que darle la razón, aunque hasta ahora sigo dudando de ese tipo de acciones y corroborando, él por qué Venezuela está tan amolado.
Sin proyecto de Nación no se forja una patria, mucho menos se modifica la conducta de las masas,en Cuba por ejemplo (los que quedan) están conscientes de que la culpa de su avance aletargado es por un Bloqueo que data de los años sesenta. En México tan solo tenemos como escuela o adoctrinamiento él hacer culpable de todos los males del sistema a ex presidentes en turno, primero fue Fox, después Calderón, pasado levemente por Peña Nieto y ahora Zedillo está de moda, pero ojo, atacar no es adoctrinar y el reflejo natural es el abstencionismo del pasado proceso judicial, en donde el proyecto de AMLO y su camino a la izquierda fracasó, en el mismo escenario que le dio el triunfo, las urnas.
Ahora solo tenemos dos caminos, o nos acostumbramos a vivir y experimentar él SÍNDROME DEL FRACASO y seguir el camino del fracaso y la frustración ante los partidos heridos de muerte como son PAN y PRI, adoctrinar a esa masa políticamente analfabeta que por becas, apoyos o lo que sea, responden al mandato muy pero muy por encimita del partido gobernante y/o definitivamente se tendrá que crear una nueva corriente política que capitalice la frustración de los mal llamados neoliberales, así de simple, así de concreto…Así las Cosas