
Recientemente circuló en redes y de manera oficial la fotografía de Julio César Chávez hijo esposado y siendo conducido a su nuevo hogar. Imagen que evidenció infinidad de mensajes. De entrada, se demostró que llegó sano y salvo, que al estar en poder de las autoridades mexicanas, de aquí en adelante este peculiar reo es responsabilidad de las autoridades federales y lo más importante y quizás lo menos entendible el actuar de la embajada estadounidense al ser quien distribuyó esa imagen, tema que abre o evidencia que nuestros vecinos del norte están operando de manera oficial en temas más allá de las atribuciones de la diplomacia.
Ronald Jonhson coronel retirado y convertido en embajador estadounidense cuenta en su haber un largo historial, aparte de ser un militar retirado, miembro de la CIA y experto en todo lo que tenga que ver con inteligencia, hasta suponemos debe de saber cómo torturar hormigas chicatanas. Johnson ha participado en infinidad de misiones en diferentes países, todos ellos con graves problemas, algunos de ellos invadidos directa o indirectamente por su nación. Al embajador se le conoce como el artífice del milagro salvadoreño y principal asesor de Nayib Bukele y para muchos el embajador amigo del presidente es el artífice intelectual de la exitosa estrategia que logró en un proceso de cinco fases desarticular a los temidos maras, encarcelándolos violando todo derecho humano y que finalmente permitió despresurizar la violencia, meter a miles de pandilleros a inhumanos centros de detención y finalmente presentar resultados reales, obviamente ignorando todo señalamiento de violaciones de derechos humanos.
Todo mundo aplaudió esta medida por razones lógicas y el embajador Jonhson triunfante en San Salvador con otra medalla en su currículo. Ahora por primera vez con la simple emisión de una fotografía de un muy conocido señalado y sentenciado con una deportación por primera vez ha sido la primera muestra de que Jonhson comenzó a operar en México, finalmente, pero ya está actuando y emitiendo su primer mensaje cifrado, pero mensaje al fin. Obviamente esta señal pasó desapercibida, pero con esta acción se abre ya un nuevo escenario de actuación de una embajada en la vida diaria de México y si no tiempo al tiempo…En Londres en el palacio de Buckingham los turistas solo por fuera pueden observar, si alguno quiere entrar, hay un recorrido pagado y un guía te da el tour breve pero suficiente para sentir el aire de la realeza.
En Chihuahua también contamos con un palacio, el de gobierno en donde nadie puede entrar ya que los agentes simplemente se han convertido en una cortina superior a la de los acereros de Pittsburg. Ahora resulta que en este mini Precos tienes que anunciar a donde y con quien vas y si no pasas la prueba simplemente y alegando que este edificio es solo para asuntos concretos te prohíben la entrada. En palacio desde el gobierno y tras el ataque a Patricio Martínez se pusieron arcos detectores y era complejo entrar. Ahora sin arcos y con guardias con tablets que toman foto a tu identificación acceder a palacio es toda una odisea.
Se les olvida a las autoridades de que palacio de Gobierno es un edificio público y parte de un recorrido turístico de la capital, se les olvida a las autoridades de que el Altar a la Patria está para ser visto y revivir un periodo importante en nuestra historia, sin contar la existencia del museo de la independencia que en teoría son puntos clave de la historia de México en la cual Chihuahua fue clave, aunque sea por haberle dado chicharrón al cura Hidalgo, o simplemente recorrer los murales en los dos pisos de palacio. Respeto es lo que propios y ajenos necesitan para recorrer edificios públicos.
Señores nadie visita la silla de King, Kong por la sencilla razón de no haber nada que ver, solo tramites y ahí sí es entendible que entren quienes vayan a un trámite, pero prohibir o limitar el acceso a Palacio de Gobierno es simplemente una medida literalmente estúpida…Así las Cosas