El diputado Arturo Parga presentó iniciativa para que se contemple en la Ley a los profesionales en psicomotricidad que dentro de los planteles educativos estatales, ocupan sus plazas como profesores de educación física, sin el reconocimiento correspondiente.
Aunado a esta falta de reconocimiento legal los ocupan por muy pocas horas de servicio, cuando asegura el legislador “su capacidad da para más y es imprescindible su función para el desarrollo de las habilidades de los alumnos con discapacidad, sobre todo aquellas del área motriz”.
Mediante la reforma dirigida al Congreso Federal busca garantizar el funcionamiento de los servicios de educación especial pues queda a decisión de las autoridades educativas si se contempla o no cuando en la Carta Magna debe garantizarse una educación de calidad.
Se solicita a la Secretaría de Educación Pública, para que se incluya el área de psicomotricidad en educación especial, en el libro de Orientaciones generales para el funcionamiento de los servicios de educación especial.
Al Congreso de la Unión para que se integre dentro del área de educación especial, la especialidad en psicomotricidad, como parte del equipo de apoyo técnico pedagógico de la USAER y de CAM, siendo los anteriores licenciados en Educación Física.
A la Secretaría de Educación y Deporte, para que se haga el reconocimiento correspondiente de las plazas de los docentes de psicomotricidad en el área de educación especial que se encuentran en servicio y que se les garanticen los derechos que les corresponden, sin perder los derechos antes adquiridos.
Mientras Andrés Manuel López Obrador insistió que el huachicol se había erradicado, los datos más recientes del gobierno de la 4T cuentan una historia muy diferente.
Son cerca de 70 millones de litros asegurados en solo nueve meses del actual gobierno de Claudia Sheinbaum, que comparados con los 50 millones incautados en todo el sexenio de AMLO, muestra que el delito nunca desapareció, sino que va en aumento.
Esto ya no sólo genera especulaciones ante la inacción o simulación, sino que podría estarse preparando un nuevo negocio de corrupción tras los más de cien carro-tanques de huachicol que se movían por el país, y la refinería clandestina en Veracruz.
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