SGQXIrEPor Salvador CamarenaSGQXIrE Omnia.com.mx
SGQXIrEDiez planas que digan: hablando de percances y/o tragedias en el ejercicio de gobierno, los funcionarios públicos han de evitar referirse a tales hechos como “accidentes”.SGQXIrE Omnia.com.mx
SGQXIrEAyer la presidenta Claudia Sheinbaum nombró la muerte de 40 personas en una estación del Instituto Nacional de Migración (INM) en 2023 como “accidente”. Es un desacierto que contradice la imagen de alguien que busca y demanda excelencia en la función pública.SGQXIrE Omnia.com.mx
SGQXIrEPorque en el incendio del 27 de marzo de 2023 en Ciudad Juárez, además de 40 personas fallecidas hubo decenas heridas. Y esa tragedia no fue fortuita, cosa de la mala suerte o del destino. Fue, cuando menos, negligencia gubernamental.SGQXIrE Omnia.com.mx
SGQXIrETodo mundo vio las imágenes donde al percatarse de las llamas los encargados del centro migratorio huyen dejando encerrados, inhumanamente, a los migrantes. Escenas que evidencian falta de protocolos ante emergencias, nula reacción en protección civil, etc.SGQXIrE Omnia.com.mx
SGQXIrECómo habrá sido de terrible lo sucedido que incluso la enclenque Comisión Nacional de los Derechos Humanos de Rosario Piedra emitió la recomendación 111VG/2023, en la que denuncia violaciones graves y señala responsabilidad de varias dependencias del gobierno anterior.SGQXIrE Omnia.com.mx
SGQXIrEY si bien es cierto que el gobierno mexicano inició un proceso de indemnización a las familias de las víctimas, también lo es que López Obrador e incluso la presidenta Sheinbaum cobijaron al entonces titular del INM, Francisco Garduño.SGQXIrE Omnia.com.mx
SGQXIrEMorena se caracteriza por su cerrazón a la hora de atender reclamos con respecto a funcionarios que fallan en el cargo. Sin embargo, pocos han sido tan protegidos a pesar de su mal desempeño como Garduño, al punto que solo muy recientemente dejó el INM. SGQXIrE Omnia.com.mx
SGQXIrEY hasta el último minuto Garduño se salió con la suya: no sólo permaneció en el INM más de dos años después del terrible incendio de esa ratonera que fue la estación migratoria de Juárez, sino que se fue sin cumplir con otro de sus deberes: no hizo la disculpa pública.SGQXIrE Omnia.com.mx
SGQXIrEComo parte del proceso de resolución del caso, los responsables del INM tenían que ofrecer una disculpa. En un par de ocasiones se manejaron fechas para la misma. Hoy las víctimas siguen a la espera de un acto institucional propio de la dimensión de la enorme falla.SGQXIrE Omnia.com.mx
SGQXIrEY aunque Garduño ya es historia, pues por fin la presidenta Sheinbaum pudo poner este mes en el INM a su designado (Sergio Salomón Céspedes, exgobernador de Puebla), tal parece que la mandataria no puede nombrar las cosas por su nombre.SGQXIrE Omnia.com.mx
SGQXIrEEste jueves en la mañanera le preguntaron a Sheinbaum sobre el nuevo encargo a Salomón Céspedes, tras lo cual le cuestionaron si se iban a revisar “¿también las instalaciones de las estaciones migratorias para cuestiones de protección civil?”.SGQXIrE Omnia.com.mx
SGQXIrE-Esos centros cambiaron por completo a partir del accidente que hubo, se cambió por completo, fue la respuesta de Sheinbaum.SGQXIrE Omnia.com.mx
SGQXIrELa presidenta Sheinbaum al arrancar su gobierno estipuló, con toda razón, que lo que no se nombra no existe.SGQXIrE Omnia.com.mx
SGQXIrEA la tragedia de la estación migratoria se le puede llamar “suceso lamentable”, que lo es; o “terrible tragedia”, que también es el caso; o “falla gubernamental que no se puede repetir”, desde luego. Pero nombrarla como “accidente” reduce su gravedad, y algo peor: lo ocurrido en Juárez no tiene lado positivo; de ninguna manera. Mas sí pueden sacarse de esos hechos lecciones para que la probabilidad de una cosa similar sea muy baja o prácticamente inexistente.SGQXIrE Omnia.com.mx
SGQXIrELa condición para ese aprendizaje es nombrar la muerte de esas 40 personas que estaban en resguardo del gobierno de muchas formas, pero nunca como un “accidente”.SGQXIrE Omnia.com.mx
SGQXIrECon información de El FinancieroSGQXIrE Omnia.com.mx