La diputada del PRI, Georgina Zapata solicitó al gobierno federal que tome acciones urgentes necesarias para contrarrestar los efectos inflacionarios que se viven en nuestro país, ante la peor cuesta de enero que se haya vivido en los últimos 21 años.
Recordó que la canasta básica es un medible económico implementado con el fin de medir los precios de los principales artículos considerados de primera necesidad para una familia de 4 integrantes en un plazo de una semana.
Son considerados por la PROFECO como canasta básica los siguientes productos: Aceite, arroz en grano, azúcar morena, bistec de res, cebolla, chile serrano, chuleta de puerco, frijol en grano, huevo blanco, jabón de tocador, tomate saladet, limón, manzana, melón, pan, papel higiénico, pasta para sopa, pollo entero, tortilla de maíz y zanahoria.
En la zona norte del país, en la cual se encuentra ubicado Chihuahua, junto con Baja California, Coahuila, Nuevo León, Sonora y Tamaulipas, se encontró la canasta básica a un precio máximo de $1,006.30 y un mínimo de $713.78.
Señaló el precio del limón en más de 300%, situándose el mismo en $79.90 el kilo. Encontramos frutas y verduras con un incremento de hasta un 436%, lo cual abona a una tasa inflacionaria promedio de mas del 7.36%, cifra confirmada por el Gobierno Federal y confirmada por expertos economistas a nivel mundial.
“Actualmente México se encuentra en el séptimo lugar mundial en cuestión inflacionaria, entre las 31 economías revisadas, en el 2021 el líder de la inflación mundial fue de nuevo Venezuela, con una variación de 1,198% anual”, acotó.
La salida de capitales de inversión de nuestro país, la venta de corporaciones bancarias con capitales muy importantes, así como el constante cambio de funcionarios y políticas públicas, generan un clima de incertidumbre y de falta de seguridad, en la que indudablemente se incuban las condiciones inestables de una economía que no tiene rumbo.
“Exigimos al Ejecutivo Federal tome las determinaciones necesarias para dar condiciones de seguridad económica a la ciudadanía, para que las empresas mexicanas sientan que los gobernantes buscan la estabilidad de nuestro país, y que los mexicanos puedan alcanzar una tranquilidad de que su ingreso es suficiente para poder lograr las condiciones mínimas de vivienda”, agregó.