VISYMAiEl medio estadounidense de entretenimiento The Shade Room obtuvo en exclusiva la grabación de una conversación telefónica filtrada entre el rapero Sean Combs, actualmente en prisión, y su colega Kanye West, en la que intercambian elogios y palabras de ánimo.VISYMAi Omnia.com.mx
VISYMAiAl principio del diálogo, Combs, conocido artísticamente como P. Diddy, le recuerda a West su talento y lo anima a "ponerse detrás del micrófono" y enfocarse de nuevo en la música. "Diviértete, vuelve a sonreír […]. Cuando salga, quiero verte destrozar los estadios. Necesito verte de vuelta en el escenario, rapeando de verdad y actuando", dijo.VISYMAi Omnia.com.mx
VISYMAi"Sí, es hora de que tome el micrófono y vuelva a la carga. Me encanta, me encanta la música otra vez", respondió West, ahora conocido como Ye. VISYMAi Omnia.com.mx
VISYMAiDiddy también le expresó a Kanye su cariño y aprecio, y le agradeció por cuidar de sus hijos luego de su arresto en septiembre pasado. Afirmó que estar tras las rejas era "una mierda jodidamente triste" y que "el diablo es un mentiroso". Añadió que está seguro de que va a "superar" sus problemas judiciales y que estará con él muy pronto.VISYMAi Omnia.com.mx
VISYMAiUna fuente cercana al asunto dijo en exclusiva para el diario New York Post que Combs, a la espera de su juicio por cargos federales de delitos sexuales, no sabía que su llamada estaba siendo grabada. Si bien parece que Ye grabó en video la conversación, se desconoce quién filtró el material. La fuente señaló además que, al contrario de lo que se especula en redes sociales, "la llamada fue real y no es inteligencia artificial".VISYMAi Omnia.com.mx
VISYMAiCon información de actualidad.rt.comVISYMAi Omnia.com.mx
El intento de desaparecer los Órganos Públicos Locales Electorales, incluidos los tribunales electorales estatales, y centralizar la organización de todos los comicios en el INE y los temas jurídicos a los tribunales federales, no es un tema que deba abordarse con ocurrencia, sino con mucho cálculo político y principalmente económico.
El INE, se sustenta con recursos del presupuesto nacional y los OPLEs, como el Instituto Estatal Electoral de Chihuahua, dependen de los presupuestos públicos locales para operar.
En 2021, el IEE de Chihuahua manejó un presupuesto de 457 millones 629 mil pesos para organizar las elecciones de ese año, incluyendo innovaciones como el voto chihuahuense en el extranjero y la implementación del PREP-Casilla. Para la elección judicial 2025, se autorizó una ampliación presupuestal para el IEE de 328 millones de pesos.
Si los OPLEs desaparecen, por qué los estados, que ahora financian sus propios procesos, tendrían que aportar recursos al INE, es muy absurdo pensar que los gobiernos locales aceptarían sin chistar la cantidad solicitada por una autoridad nacional, sin voz ni voto en la administración de esos fondos.
La centralización, aunque pueda prometer una aparente simplificación, corre el riesgo de despojar a los estados de una parte fundamental de su autonomía, y responsabilidad democrática.
El intento de desaparecer los Órganos Públicos Locales Electorales, incluidos los tribunales electorales estatales, y centralizar la organización de todos los comicios en el INE y los temas jurídicos a los tribunales federales, no es un tema que deba abordarse con ocurrencia, sino con mucho cálculo político y principalmente económico.
El INE, se sustenta con recursos del presupuesto nacional y los OPLEs, como el Instituto Estatal Electoral de Chihuahua, dependen de los presupuestos públicos locales para operar.
En 2021, el IEE de Chihuahua manejó un presupuesto de 457 millones 629 mil pesos para organizar las elecciones de ese año, incluyendo innovaciones como el voto chihuahuense en el extranjero y la implementación del PREP-Casilla. Para la elección judicial 2025, se autorizó una ampliación presupuestal para el IEE de 328 millones de pesos.
Si los OPLEs desaparecen, por qué los estados, que ahora financian sus propios procesos, tendrían que aportar recursos al INE, es muy absurdo pensar que los gobiernos locales aceptarían sin chistar la cantidad solicitada por una autoridad nacional, sin voz ni voto en la administración de esos fondos.
La centralización, aunque pueda prometer una aparente simplificación, corre el riesgo de despojar a los estados de una parte fundamental de su autonomía, y responsabilidad democrática.