w12QLm1EFE.- 11 militares de Ecuador murieron este viernes durante un operativo contra la minería ilegal, al sostener un enfrentamiento armado con los denominados Comandos de la Frontera (GDO), un grupo de disidentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), según informó la fiscalía.w12QLm1 Omnia.com.mx
w12QLm1El enfrentamiento se registró en el sector de Alto Punino, una zona situada en la cuenca alta del Río Punino donde ha proliferado en los últimos años la minería ilegal de oro, perteneciente a la provincia de Orellana, fronteriza con Colombia.w12QLm1 Omnia.com.mx
w12QLm1Las víctimas pertenecen a la Brigada de Selva 19 Napo, del Ejército ecuatoriano, quienes "habrían sido atacados por el grupo delincuencial organizado "Comandos de la Frontera", durante una operación reservada de control minero que el Ejército ejecutaba en la zona, según las primeras indagaciones" realizadas por el ministerio público. w12QLm1 Omnia.com.mx
w12QLm1La Fiscalía dirigió las primeras diligencias enfocadas en el levantamiento de los cadáveres, y trasladaron a los 11 cuerpos a la brigada militar para identificarlos y llevarlos al Centro Forense de Lago Agrio.w12QLm1 Omnia.com.mx
w12QLm1En las publicaciones de la fiscalía no mencionó ningún deceso de los atacantes, tampoco se informó algún detenido.w12QLm1 Omnia.com.mx
w12QLm1Con información de Latinusw12QLm1 Omnia.com.mx
El intento de desaparecer los Órganos Públicos Locales Electorales, incluidos los tribunales electorales estatales, y centralizar la organización de todos los comicios en el INE y los temas jurídicos a los tribunales federales, no es un tema que deba abordarse con ocurrencia, sino con mucho cálculo político y principalmente económico.
El INE, se sustenta con recursos del presupuesto nacional y los OPLEs, como el Instituto Estatal Electoral de Chihuahua, dependen de los presupuestos públicos locales para operar.
En 2021, el IEE de Chihuahua manejó un presupuesto de 457 millones 629 mil pesos para organizar las elecciones de ese año, incluyendo innovaciones como el voto chihuahuense en el extranjero y la implementación del PREP-Casilla. Para la elección judicial 2025, se autorizó una ampliación presupuestal para el IEE de 328 millones de pesos.
Si los OPLEs desaparecen, por qué los estados, que ahora financian sus propios procesos, tendrían que aportar recursos al INE, es muy absurdo pensar que los gobiernos locales aceptarían sin chistar la cantidad solicitada por una autoridad nacional, sin voz ni voto en la administración de esos fondos.
La centralización, aunque pueda prometer una aparente simplificación, corre el riesgo de despojar a los estados de una parte fundamental de su autonomía, y responsabilidad democrática.
El intento de desaparecer los Órganos Públicos Locales Electorales, incluidos los tribunales electorales estatales, y centralizar la organización de todos los comicios en el INE y los temas jurídicos a los tribunales federales, no es un tema que deba abordarse con ocurrencia, sino con mucho cálculo político y principalmente económico.
El INE, se sustenta con recursos del presupuesto nacional y los OPLEs, como el Instituto Estatal Electoral de Chihuahua, dependen de los presupuestos públicos locales para operar.
En 2021, el IEE de Chihuahua manejó un presupuesto de 457 millones 629 mil pesos para organizar las elecciones de ese año, incluyendo innovaciones como el voto chihuahuense en el extranjero y la implementación del PREP-Casilla. Para la elección judicial 2025, se autorizó una ampliación presupuestal para el IEE de 328 millones de pesos.
Si los OPLEs desaparecen, por qué los estados, que ahora financian sus propios procesos, tendrían que aportar recursos al INE, es muy absurdo pensar que los gobiernos locales aceptarían sin chistar la cantidad solicitada por una autoridad nacional, sin voz ni voto en la administración de esos fondos.
La centralización, aunque pueda prometer una aparente simplificación, corre el riesgo de despojar a los estados de una parte fundamental de su autonomía, y responsabilidad democrática.